Difícilmente podrá hallarse en el balompié un mejor escenario que el de hoy para la Selección Mexicana. A un año de la Copa del Mundo y ante el campeón de Europa, con el que juega el mejor futbolista del orbe, el equipo dirigido por Juan Carlos Osorio tiene la oportunidad de mostrarse a plenitud, y lo más importante, comprobar que está para duelos de alta exigencia.

Sí, Cristiano Ronaldo es un astro en toda la extensión de la palabra, mas el Tricolor siempre se ha caracterizado por incrementar su nivel ante adversarios de alto calibre, como el de este día en Kazán. Es hora de olvidar el ridículo de hace un año.

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