México: líder necesario para la protección del medio ambiente

Hoy más que nunca México juega un papel crucial en la protección y cuidado del medio ambiente, tanto a nivel global, como regional. Dentro del escenario global México cuenta con un creciente reconocimiento como un líder ambiental progresista. Muestra de ello es el compromiso a la cooperación global y la colaboración regional, junto con Estados Unidos y Canadá, en temas de energía limpia y mitigación de cambio climático. Asimismo, este año México es el anfitrión de la 13ª Conferencia de las Naciones Unidas de la Convención de Biodiversidad, reforzando su rol en el ámbito internacional.

Los ambiciosos compromisos, tanto nacionales como internacionales, adoptados por el gobierno mexicano llegan en un momento crítico, cuando a nivel global enfrentamos retos políticos para encontrar soluciones ambientales que aseguren prosperidad para todos los habitantes del planeta y para la naturaleza. Ante este escenario, Environmental Defense Fund (EDF) ve a México como un actor y aliado clave para continuar impulsando iniciativas ambientales y regionales de impacto global.

A nivel internacional, el liderazgo de México en materia de cambio climático es evidente: Fue la primera economía emergente - y la cuarta a nivel global – en anunciar sus compromisos de reducción de gases efecto invernadero (GEI) como parte del proceso que eventualmente logró el histórico Acuerdo de Paris, impulsando a que otros países anunciaran sus metas. El país ha sido un líder en la comunidad global y, junto con Estados Unidos y Canadá, impulsó el consenso a nivel mundial en dos recientes avances que reducirán las emisiones de GEI provenientes de la aviación internacional y de la industria global de refrigerantes.

México también es una potencia en asuntos regionales. Su relación cercana con estados y provincias en Estados Unidos y Canadá le han permitido avanzar en metas compartidas de energía limpia y mitigación de cambio climático. La cooperación con California y el reciente acuerdo con Quebec y Ontario sobre mecanismos de precio al carbono, posicionan estratégicamente a México como un actor clave en el tema y en la región. En junio, México, Estados Unidos y Canadá acordaron las mismas metas nacionales de reducir las emisiones de metano del sector de petróleo y gas en un 40-45%, el cual es un potente gas de efecto invernadero. Los tres países se comprometieron a desarrollar regulaciones nacionales para este fin y llegar a su meta en 2025, invitando a otros países a unirse y aprovechar esta oportunidad de alto impacto. En EDF estamos convencidos de que solamente colaborando sin fronteras podremos lograr nuestras metas como región y generar beneficios comunes.

Muchas de las estrategias que México impulsa no sólo buscan atender asuntos ambientales urgentes, también apoyan el crecimiento económico del país. En el caso de las emisiones de metano existen estudios que muestran la viabilidad de reducir las emisiones de este gas del sector de petróleo y gas logrando un ahorro de 38 millones de pesos al año, evitando que se fugue de los gasoductos sin quemarse. Lograr estas reducciones podría avanzar anticipadamente el cumplimento de las metas climáticas, mientras que un mercado de carbono podría proveer una estrategia a largo plazo para limitar las emisiones de GEI y premiar la innovación, eficiencia y desarrollo de tecnología para un crecimiento económico bajo en carbono.

El sector pesquero también ofrece una oportunidad para el desarrollo de la economía nacional. México es uno de los 20 países con mayor producción pesquera en el mundo y podría liderar un cambio hacia un modelo de pesca más eficiente, rentable y sustentable. Algunas de las pesquerías del país ya están funcionando con un manejo sustentable, asegurando mejores ingresos para las comunidades pesqueras y proporcionando modelos exitosos que pueden ser replicados. México debe fortalecer su marco legal y regulatorio para que el manejo pesquero basado en derechos tenga resultados a nivel nacional. Nuestros análisis muestran que si México transita hacia un manejo más sustentable y combate la pesca ilegal, habrá grandes beneficios para pescadores y medio ambiente. En los próximos 20 años podríamos tener 70% más peces en el agua, 24% más capturas y comunidades más prósperas con ganancias de hasta 3,920 millones de pesos anuales.

En este contexto de enorme oportunidad y crecimiento, el reto para México es el de construir sobre estos cimientos e implementar las acciones y medidas necesarias para avanzar la agenda ambiental. En EDF hemos colaborado por más de ocho años junto con México para lograrlo y estamos listos para expandir nuestro trabajo. Nuestro enfoque para la creación de soluciones ambientales que funcionan para el medio ambiente, la sociedad y la economía pueden ayudar a que México sea un ejemplo de éxito duradero. Estoy segura de que nuestra alianza estratégica contribuirá a implementar soluciones con importantes resultados medibles, en beneficio de México, su gente y sus recursos naturales.

Directora Ejecutiva del Environmental Defense Fund