El Centro Pompidou de París

indicó hoy que a partir de octubre y hasta septiembre de 2019 renovará completamente tanto su icónica escalera exterior, conocida como la oruga, como su entrada principal, con el objetivo de mejorar el acceso de los visitantes y su seguridad.

Cuatro décadas después de su inauguración, el edificio diseñado por Renzo Piano y Richard Rogers se adapta a las nuevas necesidades con unas obras que obligarán a desviar temporalmente la entrada de la gente a los laterales.

La escalera mecánica que trepa por la fachada y los paneles de vidrio que la recubren serán reemplazados, y se procederá igualmente a mejorar la climatización de la subida, que ofrece una de las mejores vistas de la ciudad.

La entrada principal, por otra parte, será ampliada, con la instalación de seis puertas giratorias, una nueva señalización y una mejor gestión del flujo de visitantes y de abonados a la Biblioteca Pública de Información (BPI), que está implantada en el complejo.

Entre tanto, tres ascensores provisionales colocados en el exterior permitirán llegar a la quinta y a la sexta planta. La entrada inferior se hará por los laterales del edificio, icono moderno en el centro de la capital gala.

Las obras, según señalaron hoy sus responsables en la presentación y en la del avance de la nueva temporada artística, tienen un presupuesto de 17 millones de euros.

El Pompidou ha decidido, además, renovar sus actuales operaciones de mecenazgo con una participación integradora de las empresas, que no se limitarán a aportar financiación sino que colaborarán también en el diálogo artístico.

Su nuevo Fondo de Dotación moviliza en esta primera edición y para la temporada 2018/2019 a diez compañías, a razón de 200 mil euros anuales cada una.

Se trata, según la institución, de una "experiencia única entre el mundo económico y el de la creación". Para su lanzamiento se ha elegido como hilo conductor "Los poderes de la emoción".

La temporada comenzará oficialmente los próximos 14 y 15 de septiembre con debates y actividades en torno a ese tema. Las empresas se comprometen a acoger a un artista durante cerca de medio año y a colaborar en el otoño de 2019 en la exposición que reunirá sus creaciones.

El presidente del Pompidou, Serge Lasvignes, apuntó que el museo busca "reinventarse cada vez, recuperar el espíritu pionero de sus inicios".

Y en esa búsqueda, presentó un programa que a partir de octubre ofrece una panorámica completa sobre el cubismo o la mayor retrospectiva dedicada al arquitecto japonés Tadao Ando.

Entre los puntos fuertes de 2019 se encuentran la primera retrospectiva francesa a Victor Vasarely, padre del "arte óptico", una exposición consagrada a Dora Maar, fotógrafa y musa de Picasso, u otra centrada en Francis Bacon, uno de los mayores pintores del siglo XX.

akc

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