Una sociedad mutilada

Toda obra de arte; ya sea una interpretación escénica, una escultura, pintura o hasta una obra literaria se concibe y se crea completa, cada fragmento, cada compás, incluso la mínima y tenue pincelada tienen un porque y son parte de un todo que forma la armonía de la obra; igual los seres vivos, cada órgano, miembro o célula alimenta una función, un sentido.

Cuando falta algo de lo que conforma el todo se mutila el significado y la función; aun cuando se conserve la esencia, está incompleta y si es algo vivo o latente otros órganos, otras partes tienen que redoblar esfuerzos para tratar de suplir la deficiencia.

Algo muy similar le está sucediendo a nuestro país; día a día los robos, las agresiones, los asaltos, secuestros y homicidios mutilan al individuo, a las familias y a la colectividad; los enfrentamientos y las flagrantes faltas de respeto a la autoridad mutilan la confianza en quienes tienen el mandato y las atribuciones para cuidarnos como sociedad y no es solo a los uniformados, es también a la autoridad administrativa, al ejecutivo y a todo su equipo, tenemos por costumbre menospreciar, sobajar y hasta pendejear a quien está en el poder, (de a gratis o ganado a pulso) día a día les enseñamos a nuestros hijos a romper las reglas, a tratar de encontrar la solución fácil aun y cuando vaya de por medio un soborno, es más, festejamos a los pequeños cuando nos sobornan con lo que tienen a su alcance, un te quiero o una carita de esas que nos rompen el corazón.

Nuestro país está mutilado, lo mutila el crimen organizado, los malos gobernantes, el raterillo de esquina y lo peor de todo es que nosotros mismos lo mutilamos con nuestra indiferencia, nuestra arrogancia, el egoísmo y la apatía son características impregnadas en lo más profundo de cada ciudad, cada colonia y cada vez más común en cada familia.

A México le conviene que estemos unidos, que vivamos y propiciemos un buen ambiente, tenemos que hacer equipo y luchas de manera cotidiana por el bienestar de todos los mexicanos, tenemos que encontrar la forma de ser solidarios y tratar de reparar o suplir todo lo que nos ha sido mutilado, si seguimos cada quien jalando para nuestro lado terminaremos por desmembrar y aniquilar lo que hoy conocemos como sociedad, terminaremos con nuestro país.

A lo largo de muchos años y luchas lamentablemente muchas de ellas internas, nos hemos dado como sociedad una gran herramienta; la democracia, pero la democracia no es estática, no se decreta y tampoco no se le reza, a la democracia se le debe cuidar, fortalecer, para la democracia debemos vivir unidos, aunque pensemos diferente, la democracia no es del gobierno en turno, sin importar si es neoliberal o conservador, no es de los “chairos” o de los “fifís”, la democracia es del estudiante, del obrero, tanto del campesino como del oficinista; la democracia es de todos y todos somos la democracia.

Debemos entender que gobierno y ciudadanos, todos somos México.

Hoy en día de una u otra forma todos somos víctimas y por el bien de toda víctima independientemente del género y la edad, hacer comunidad es el mejor blindaje contra los abusos: los agresores son muy "valientes" contra la víctima sola e indefensa pero no pueden con una comunidad que cuida y defiende a los más vulnerables.

A la medida que sigamos desfragmentándonos como sociedad seremos cada vez más vulnerables, entre más nos alejemos más propensos a ser la próxima víctima, no dejes que te mutilen, la sociedad te necesita.