Trabajar en moda siempre fue algo que me  ilusionó muchísimo. La idea me atrajo desde antes de elegir una carrera universitaria y la posibilidad de formar parte de la industria me llevó a salir de mi zona de confort y perseguir mis sueños. Quizá si la moda y todas sus aristas no me apasionaran tanto, no hubiera dado este giro de 180 grados a mi vida.


Para los que no conozcan esta historia, comenzaré platicándoles sobre los inicios de High On Fashion. Hace algunos años trabajé para una revista, donde literalmente era la coffee girl y la YVM (“y veme a traer esto, y veme a traer lo otro”). Mi interés por aprender  y absorberlo todo fue lo que me llevó a ser la asistente de coordinación y a tener una sección propia. Todo comenzó a fluir y por primera vez sentí que pertenecía a algo que me hacía inmensamente feliz. Empecé coordinando moda como freelance, me especialicé en fashion styling y después en consultoría de imagen porque era consciente de que si quería vivir de esto entonces tendría que adquirir el grado de especialización necesario para ofrecer a la industria lo que solicitaba y, sobre todo, para sentirme lo suficientemente segura de mis conocimientos y habilidades.


A la par nació mi blog, pero si les soy muy sincera, jamás pensé que se convertiría en lo que es hoy. Decidí crear High On Fashion como un espacio en donde me pudiera expresar libremente y hablar de lo que me gustaba. Hace casi seis años no había apertura de las marcas para colaborar con medios digitales, y ser blogger no se consideraba una profesión. He crecido y evolucionado con High On Fashion y a su vez mi espacio ha crecido y evolucionado conmigo. El camino no ha sido fácil: al contrario, ha sido una aventura  en la que me he redescubierto mil veces, me he retado a mí misma y he tenido que salir de mi status quo.  Sin embargo, amo lo que hago y no me imagino dedicarme a otra cosa.


Hoy High On Fashion es una empresa que además de ser una plataforma digital, también trabaja con marcas como un socio estratégico para ofrecer un valor agregado a los consumidores de información. En HOF trabajan personas maravillosas que me llenan de alegría y que me inspiran a seguir persiguiendo y luchando por lo que anhelo. Emprender no es sencillo, pero es lo mejor que puedes hacer si, como yo, valoras tu libertad y realmente quieres trascender.


Trabajar duro es la única manera del alcanzar nuestras metas, y más en una industria tan vertiginosa como la moda. Mi consejo para todos aquellos que quieran incursionar en este mundo tan maravilloso (y a la vez tan complejo) es: trabajen mucho, prepárense, rétense y quiténse la idea de que es una industria superficial en la que sólo quienes tienen contactos triunfan. Descubrirte en un entorno adverso, definir tus debilidades y trabajar en ellas hasta que se vuelvan fortalezas es un reto diario que te hace crecer como persona y profesionista, que te lleva a lugares inesperados y encantadores.

Con cariño, Gina.


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