Ni rosas ni arrimones

Otra vez es 8 de marzo, un año más para conmemorar el Día Internacional de la Mujer, porque de nuevo no hay nada que celebrar. Como ya es costumbre, en las instituciones del Estado este día se ha convertido en una especie de día de las madres parte dos, en donde no se reflexiona sobre las condiciones de las mujeres desde una perspectiva de género, sino que se les celebra con rosas como si de una efeméride se tratara. Por otro lado, la violencia de género sigue siendo naturalizada y fomentada cotidianamente, no sólo en espacios institucionales, sino también a través de las redes sociales.

A esto se han sumado los clásicos eventos como el que organizó el Poder Judicial del  Estado de Yucatán, en donde sólo participa una mujer, como moderadora, y se incluye en la mesa al sacerdote Raymundo Pérez Bojórquez. Feministas yucatecas y organizaciones de la sociedad civil, incluyendo a GIRE, protestamos ante esta flagrante violación al Estado Laico, en contra del uso de la campaña de Naciones Unidas “He for She” para validar dicho evento y de los eventos en los que los hombres una vez más hablan por las mujeres. (http://equis.org.mx/poder-judicial-de-yucatan-celebrara-el-8-de-marzo-at...)

Por su parte, en  redes sociales se hizo el llamado a un “Arrimón masivo” el pasado 4 de marzo. Desde un evento de Facebook se convocó a que de 3 a 4 pm se ocupara el penúltimo vagón de la línea 1 para que los hombres “se arrimaran” a las mujeres que subieran al penúltimo vagón de la estación terminal Pantitlán a Observatorio.  El evento fue dado de baja,  pero la discusión continuó y las autoridades hicieron un llamado para evitar este hecho. A pesar de que la convocatoria fracasó, el gobierno capitalino movilizó policías para evitar dicho  evento. Sin embargo, desde estas plataformas digitales siguen existiendo comunidades que con el nombre de “Arrimones y fajes en el metro” incitan a que los acosadores cuenten sus historias.

En la víspera de este Día Internacional de la Mujer, con la etiqueta de #LordPrepa10, se dio a conocer el video del profesor Ramón Urrea Bernal, donde no sólo naturaliza  el trabajo doméstico como una labor femenina, sino que con un lenguaje despectivo y vulgar incita a sus alumnos a la violencia doméstica en contra de la mujer, por negarse a sostener relaciones sexuales con él.

Estos son sólo algunos ejemplos que se volvieron virales de la violencia sexual, institucional, social, económica política que se vive en todos los espacios en contra de las mujeres.

En este terrible contexto, surgió el Paro Internacional de Mujeres, en 54 países bajo el lema “La Solidaridad es nuestra arma”. Este paro se ha pronunciado en contra del capital que explota nuestras economías informales, precarias e intermitentes, de los Estados que criminalizan los movimientos migratorios, de la brecha salarial, de la falta de reconocimiento de las labores de cuidado y el trabajo doméstico, de los feminicidios, de la persecución a las trabajadoras sexuales, para reclamar el derecho al aborto libre, para hacer visible que mientras el trabajo de cuidado no sea una responsabilidad compartida, seguiremos reproduciendo la explotación clasista y colonial entre mujeres.

Si quieres unirte al paro en México, puedes hacer un cese de actividades remunerativas o no remunerativas en el trabajo, las tareas domésticas o en los roles sociales como cuidadoras durante la jornada completa, hacer un paro de tiempo parcial, usar ropa negra o violeta, boicotear las empresas que usan el sexismo en sus propagandas o en su enfoque hacia las trabajadoras, unirte a las diversas movilizaciones o instalar en los correos electrónicos el automensaje "fuera de oficina" y explica porque, entre muchas otras.

Este 8 de marzo, las mujeres del mundo vamos a poner en práctica el mundo en el que queremos vivir. Ya basta de rosas y arrimones.