Por Ulises Castellanos*

Bienvenidos todas y todos. Arrancamos nuestro segundo año en este privilegiado espacio del Gran Diario de México. Bienvenidos pues a esta renovada barra de opinión aquí en Mirada Universal de nuestro colectivo fotográfico. Seguiremos debatiendo sobre foto, imagen, libros y continuamos promoviendo el análisis más relevante del mundo de la imagen en México y más allá de nuestras fronteras.

Hemos incorporado ya nuevas firmas, como lo comprobaron este lunes con el estreno del poeta aristócrata Juan José Díaz Infante, también fotógrafo y lanzador de satélites. Ayer regresó el académico Oscar Colorado, incansable investigador y promotor permanente de la fotografía. Por cierto, en un par de semanas volveremos con la segunda temporada de nuestro programa de radio ImagenLíquida desde las cabinas de la Universidad Panamericana.

Mañana continúa en esta pasarela la editora y fotógrafa Laura Garza, directora creativa de Círculo Rojo y amante de los viajes. Y para el viernes de esta semana cerraremos con el estreno también de un viejo talento reclutado desde Querétaro, Demian Chávez Premio Estatal de Arte y permanente promotor del fotoperiodismo en su Estado.

Por aquí han desfilado con su pluma, fotógrafos como Pedro Tzontémoc, director de Luz Portátil, Omar Torres, editor de la France Press y Héctor Guerrero, fotoperiodista tapatío que cerró el año con su particular resumen de 2016. Habrá nuevas plumas a lo largo del año. Pendientes.

Mientras tanto, quisiera aprovechar este punto de encuentro, para compartir con los que andaban de vacaciones sobre lo que pasó con mi columna del diario, sobre la Bienal de fotografía que se publicó el pasado 17 de diciembre de 2016 ( ) y qué se compartió más de 2300 veces en distintos muros. Generando todo tipo de reacciones.

Más allá de la polémica que se armó, y todos los textos que se provocaron a partir de ese día, primero que nada, quiero agradecer a toda la comunidad de investigadores, curadores y fotógrafos que participaron, por su tiempo y porque le dieron sentido precisamente a lo que se quería: visibilizar una selección de trabajos que develó una expo fallida que no tiene explicación clara y que afortunadamente el Centro de la Imagen respondió de manera oficial, anunciando que armaría mesas para “explicar” cuál era la idea del jurado y sus curadores. Bienvenido el debate pues.

Aquí algo de lo que se generó en aquella semana de intensos argumentos Arde la Bienal de Fotografía y la siguiente columna Noche de Paz y por ahí encontrarán también la carta de los 40 y su fallido intento de acusarme como un vulgar misógino serial.

Circulan una docena de textos más que en su mayoría defienden la selección del jurado de la Bienal, (algunas escritas obviamente por gente que se beneficia económicamente del Centro de la Imagen) y otros apuntes que ofrecen su legítima opinión sobre lo que encontraron al visitar la expo en la Ciudadela. Xavier Aguirre alias El Abuelo, hace un panorama buenísimo que aquí también les comparto, entre otras cosas porque lo escribe muy bien y respeto mucho su palabra. Lo demás lo podrán rastrear en los distintos muros de Facebook por donde se dijo de todo. Entre los comentarios más inteligentes y mesurados están los de Francisco Mata y Cuauhtémoc Medina entre otros.

El lunes 2 de enero, Juan José Díaz Infante, escribió en este mismo blog la experiencia de su visita a la Expo de la Bienal, aquí dejo link para su consideración :

Pero bueno, en realidad, no quiero abrumarlos ya con ese tema, lo que quiero que quede claro, es que nada de lo que escribí es de corte personal, ni va dirigido a nadie en particular; tampoco se deriva de un impulso arrebatado como han querido descalificarlo. En síntesis, nadie ha podido argumentar que lo que escribí, no fuera cierto. De hecho, ni siquiera soy participante de la Bienal, es decir, ni gané ni perdí nada.

Soy un periodista visual de muchos años -más de 30 como fotoperiodista y un par de décadas como editor- tengo derecho a expresarme y así lo hice. Se que algunos se asustaron con mi tono y en eso insisten mucho, parece que la forma sepulta el fondo. Pero les aseguró a todos los que se sintieron agredidos por mis palabras, que nada está más alejado de mi intencón, que molestar a ninguno de ustedes. Simplemente la selección de la Expo -con sus excepciones- me pareció terrible y así lo escribí.

A todos los talentos emergentes que ahí arrancan su vida profesional, le deseo suerte, pronto dejarán de ser anónimos y eso siempre viene bien en este mundillo. Acostúmbrense al debate y a la palabra franca. Sus amigos aduladores no los harán crecer, sólo les darán chamba.

A los fotógrafos consolidados y artistas de verdad, mi aprecio y me respeto de siempre, también les agradezco sus mensajes y me alegra que podamos seguir siendo amigos. A ustedes, nada les da o les quita lo que yo escriba. Ustedes son profesionales.

Como se imaginan, he recibido decenas de mails y mensajes privados, que no me corresponde comentar en este espacio por una mínima lealtad al ámbito privado; claramente no sería ético revelar aquí sus nombres o sus dichos, pero saben de corazón, que les agradezco cada una de sus palabras.

Ya veremos que pasa con el foro que piensa organizar el Centro de la Imagen, en pocos días sabremos de su honestidad y relevancia, cuando den más detalles. La lista de participantes es clave. Ojalá no sea una nueva simulación. Ese foro es una oportunidad dorada para reivindicar parte de los errores cometidos y matizar argumentos. La inteligencia debe prevalecer.

Ya lo dije antes y lo ratifico hoy, la Bienal ya no será lo que fue, cambiará de nombre y modificará sus reglas. Al tiempo. Esto no ha terminado.

Bienvenidos pues y gracias por su confianza.

*Ulises Castellanos es director general de Círculo Rojo, columnista de El Universal todos los sábados en la sección de Cultura del diario. Fotoperiodista, editor y consultor. Profesor en la Universidad Panamericana. Y autor ya de cinco libros.

Twitter @MxUlysses

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