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El gobierno de Guatemala exige a México que se respeten los derechos humanos de sus migrantes que pasan para intentar llegar a Estados Unidos. De violentarse sus garantías, se hará un señalamiento público, advierte el ministro de Relaciones Exteriores de Guatemala, Carlos Raúl Morales Moscoso.

En entrevista con EL UNIVERSAL durante su paso por México para participar en la 47 Asamblea de la Organización de Estados Americanos (OEA), que se celebró en Cancún, dijo que si bien la migración entre Centroamérica y Estados Unidos no tiene solución de un día a otro, se reconocen cambios y trabajo conjunto. Ve un vaso medio lleno y no medio vacío.

Los cruces fronterizos, puntualiza, son monumentos a la corrupción, por ello debe utilizarse inteligencia para evitar el cruce del narcotráfico.

Acepta que Guatemala recibió respuesta favorable en respeto a los derechos humanos de migrantes. Un muro, dice, no es la solución.

Colaboración estrecha

Recién tuvieron la Conferencia de Prosperidad y Seguridad para Centroamérica que organizaron México y Estados Unidos, ¿realmente le ve futuro?

—Si no tuviera futuro no nos hubiéramos sentado. ¿Dónde viven 35 millones de mexicanos? En Estados Unidos. ¿Dónde viven 3 millones de guatemaltecos? ¿Dónde viven 4 millones de hondureños y salvadoreños? En Estados Unidos. Tiene que tener futuro. Hemos iniciado con Estados Unidos un diálogo serio desde 2014, a partir de la crisis de menores no acompañados que nos ha llevado a reunirnos con nuestro principal socio, de México, de Centroamérica que es Estados Unidos. Tener futuro, presente y pasado.

Hubo un gran ruido mediático a partir del proceso electoral en Estados Unidos: que iban a deportar a 13 millones de personas. Al día de hoy, si comparamos enero de 2016 con enero de 2017, febrero, marzo 2016 con 2017, nosotros tenemos mil 500 deportados menos de Estados Unidos.

Lamentablemente se le ha trasladado un miedo a nuestra gente en Estados Unidos.

No digo que no se puedan hacer efectivas esas deportaciones más adelante, pero hasta el día de hoy mi servicio consular no ha permitido la deportación de un solo guatemalteco que no tenga orden de deportación final.

El debate es cómo hacemos para que ya no lleguen más migrantes [a Estados Unidos], bueno, pues generemos prosperidad. Hay una corresponsabilidad de todos los países en este sentido.

En seguridad, Guatemala, México, Colombia y toda la región centroamericana mantenemos estrechos vínculos en materia de seguridad y no de ahorita, de hace mucho tiempo.

Con México tenemos un gran grupo que es el Grupo de Alto Nivel de Seguridad que es lo que nos permitió, por ejemplo, capturar al señor [Javier] Duarte, el ex gobernador de Veracruz. Eso no hubiera ocurrido hace 20 años, hoy hay confianza, credibilidad, una relación estrecha.

Yo veo el vaso medio lleno no medio vacío, hay cosas pendientes, claro que las hay, pero lo más importante hoy es que hemos hecho cosas importantes.

La migración no cede...

—La migración desde México se ha reducido, la deportación desde México se ha reducido. Comparado con el año pasado México, a mayo de 2016 nos había deportado a 23 mil, en 2017 menos de la mitad.

¿Qué lectura le da a eso?

—Si hay menos deportados es que hay menos asegurados y si hay menos asegurados, yo me refiero a los datos, yo no me refiero a los shows mediáticos, para mí lo más importante son los datos, los números es lo más importante.

Yo soy el primero en reconocer la voluntad política del presidente Enrique Peña Nieto por respetar los derechos humanos, claro que esa voluntad política permea, que llegue a un policía municipal y, sobre todo, que eso permee en controlar el crimen organizado, pues eso no es fácil, es complicado.

Pero ahora, en el sexenio de Peña Nieto no tenemos la fosa con los 70 y pico de muertos de San Fernando, ni Tamaulipas, yo creo que ha habido avances y por eso es que yo veo el vaso medio lleno y no medio vacío.

Claro, yo le exijo a México respeto a los derechos humanos de mis migrantes. El canciller [Luis] Videgaray nos ofreció de inmediato algo que nunca se nos había ofrecido, que es un mecanismo de verificación del cumplimiento de los derechos humanos y eso es algo que le agradezco, porque ahora, en el momento en que tenemos conocimiento de la violación de un derecho humano, los viceministros de Honduras, El Salvador y Guatemala, llaman inmediatamente a su contraparte en México para verificar qué está pasando.

Yo no le estoy diciendo que todo es paz y maravilla, se tiene complicada pero sí puedo asegurar que hoy tenemos a un canciller mexicano más consciente del respeto a los derechos humanos por parte de México, claro, que eso tenga un efecto inmediato pues es imposible, pero los números lo que nos dicen es que ha habido un menor aseguramiento, no es como dicen que México le está haciendo el trabajo sucio a Estados Unidos.

Hoy por hoy puedo asegurar que con México estamos trabajando fuertemente y estamos exigiendo el cumplimiento de derechos humanos, vamos a señalar públicamente cada vez que alguien viole los derechos humanos, cada vez que el crimen organizado haga algo.

¿Cómo van a fortalecer la frontera entre México y Guatemala que es muy porosa?

— La frontera que bueno qué es porosa. ¿Quieren un muro? No, si se critica el muro con Estados Unidos.

Qué bueno que la frontera es porosa, qué bueno que es una frontera dinámica, lo que tenemos que evitar es que pasen droga, contrabando, delincuentes, pero qué bueno que es porosa para las cosas buenas, es una frontera dinámica.

Centroamérica está en el proceso de eliminar sus fronteras, vamos a firmar con Honduras una unión aduanera que busca eliminar los cruces fronterizos como es Europa, para facilitar el comercio, para facilitar que la gente, el comercio pueda pasar fácilmente.

México creó hace cinco años una tarjeta de visitante que permite que el guatemalteco pueda pasar libremente sin pasar ningún cruce de frontera, porque los cruces de frontera son monumentos a la corrupción. Lo que tenemos que hacer es que a través del Grupo de Alto Nivel de Seguridad Fronteriza (Gansef) identificar a los malos, a los narcotraficantes, a los que hacen el contrabando, pero la frontera es buena y yo lo último que quiero es un muro y lo último que quiero es que me edifiquen un muro en la frontera.

¿Cómo van a fortalecer la inteligencia?

—El tema está siempre en nuestra agenda, se ha trabajado, el problema es que son 959 kilómetros con 700 metros y el gran problema es que 480 kilómetros son ríos y fuertes, y el otro problema es que 280 kilómetros es jungla pura y absoluta, cuando uno se da cuenta, controlar esas áreas es complicado, las áreas que tenemos que proteger más tenemos que tener mucha tecnología y en eso obviamente tenemos que seguir avanzando.

México tiene más capacidad tecnológica que nosotros para tener sistemas de videovigilancia aérea satelital, en eso tenemos mucho que avanzar.

Tenemos muchas áreas protegidas, muchos ríos y esos factores dificultan la inteligencia, pero son temas en los que debemos seguir trabajando.

¿El tema del ex gobernador Javier Duarte sigue en suspenso?

—Fue presentada la solicitud de extradición, somos canal diplomático para presentarle a la fiscalía, ya está en manos del juez . Nos demoramos media hora en trasladarlo, desde que la embajada de México nos lo presentó, a la fiscalía. Será el juez quien determine si es viable o no la extradición. Estamos con toda la disposición de cumplir el tratado, colaborar con México para que se haga justicia y se luche contra la corrupción.

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