Hacen frente a abusos y embarazos de niñas

justiciaysociedad@eluniversal.com.mx

El gobierno mexicano tiene una gran preocupación y trabaja para erradicar el embarazo en niñas menores de 14 años y hacer frente al abuso infantil en este sector, por lo que puso en marcha una campaña con la que invita a la infancia a denunciar al 089 si están siendo amenazados, dijo Patricia Chemor, titular del Consejo Nacional de Población (Conapo).

Al presentar el informe Estado de la Población Mundial 2016, el Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA) señaló que los gobiernos deben invertir en las niñas de 10 años, a fin de reducir la vulnerabilidad que enfrentan, debido a que problemáticas como el matrimonio forzado, el trabajo infantil, la violencia y la mitigación femenina amenazan el cumplimiento de los objetivos de la agenda 2030.

El director regional del UNFPA para América Latina y el Caribe, Esteban Caballero, explicó que el estudio se enfoca en una población de 60 millones de niñas de 10 años, 35 millones de ellas viven en países con un nivel elevado de desigualdad de género.

“Si todas las niñas de 10 años de edad que viven en países en desarrollo completan la educación secundaria, las economías de esos países, colectivamente, podrían dinamizarse con un ingreso anual de 21 mil millones de dólares”, indicó.

Destacó que al garantizar los derechos de las niñas y adolescentes para vivir en condiciones de igualdad se transforma su presente, por lo que los recursos destinados a este sector de la población son “una inversión clave y necesaria para asegurar que su transición hacia la adultez sea plena, integral, creativa y participativa”.

Esteban Caballero indicó que se requiere una inversión que incida de manera directa en el crecimiento económico y en el desarrollo social de las naciones de la región.

“El aporte que puede hacer una mujer con capital humano, con educación, a la sociedad es mayor. Está comprobado que existe una correlación muy estrecha entre el nivel de educación y el nivel de ingreso”, explicó.

Caballero destacó que los recursos que empoderen a las niñas de 10 años de edad podrían triplicar sus ingresos durante sus vidas, así como impulsar el crecimiento económico de un país y una generación más sana y con una mejor educación.

Patricia Chemor, titular del Conapo, precisó que en México hay 2 millones 237 mil 284 menores de 10 años, 49% son niñas.

Señaló que para el gobierno mexicano erradicar el embarazo en niñas menores de 14 años y hacer frente al abuso infantil constituyen una “gran preocupación”, por lo que ha puesto en marcha una campaña en la que se invita a los infantes a denunciar si están siendo abusados o amenazados.

Destacó que el gobierno federal trabaja en la legislación para no permitir el matrimonio antes de los 18 años de edad entre las mujeres, porque aún hay tres estados del país que lo permiten: Sonora, Campeche y Baja California.

El informe calcula que cada día contraen matrimonio 47 mil 700 niñas menores de 18 años en los países en desarrollo; mientras que en 15 naciones de América Latina y el Caribe, una de cada cuatro niñas adolescentes tuvo su primera unión conyugal antes de cumplir la mayoría de edad.

La titular del Conapo comentó que se busca que las jóvenes tengan un acceso “amigable” a los servicios de salud y educación sexual pertinente para evitar embarazos tempranos, enfermedades de transmisión sexual y para puedan transitar a una vida adulta con educación y salud. Destacó que los embarazos precoces tienden a ser producto de una agresión.

“Se está trabajando en el sector salud para que los prestadores de servicios apliquen los protocolos, porque un embarazo a esa edad es producto de un delito; se está trabajando para empoderar a las niñas en la educación en las escuelas, para que ellas mismas puedan denunciar, que nos den cuenta de ello”, indicó Chemor.

El informe destacó que la situación de las niñas adolescentes que pertenecen a pueblos indígenas y afrodescendientes debe ser considerada de manera particular, al reconocer la heterogeneidad de su presencia en los países, su mayor ruralidad y patrones demográficos específicos, a fin de diferenciar las necesidades de apoyo a través de las políticas públicas.