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No ha pasado ni una semana de la instalación de la Asamblea Constituyente de la Ciudad de México y ya pidió apoyo a la Cámara de Diputados para su operación.

A pesar de que existe un convenio entre el Senado y el Gobierno de la Ciudad de México para brindar personal con el fin de que pueda operar, la Asamblea tuvo que pedir auxilio a los diputados federales.

Los integrantes de la Junta Instaladora de la Asamblea Constituyente de la Ciudad de México pidieron ayuda al presidente de la Cámara de Diputados, el panista Javier Bolaños, para que desde San Lázaro los auxilien con los Servicios Parlamentarios para la operación de sus sesiones.

La Constituyente tenía previsto trabajar con el apoyo parlamentario del Senado, pero con personal sujeto a disponibilidad, lo cual se complica debido a que ambos cuerpos legislativos sesionan los martes.

“Le solicitamos atentamente que las secretarías General y de Servicios Parlamentarios puedan auxiliar a este órgano soberano, en tanto se aprueba el Reglamento para el Gobierno Interior de la Asamblea Constituyente”, describe la carta que le enviaron los integrantes de la Junta Instaladora de la Asamblea Constituyente a Bolaños.

La Junta Instaladora, que encabezan Augusto Gómez (presidente); Bernardo Bátiz (vicepresidente); Ifigenia Martínez (vicepresidenta); Porfirio Muñoz (secretario) y Javier Jiménez (secretario), le enviaron una carta a Bolaños el 15 de septiembre, debido a que desde la Cámara Alta no les están brindando este apoyo a pesar de que viene establecido en un acuerdo que firmaron el jefe de gobierno, Miguel Ángel Mancera, y el entonces presidente del Senado, Roberto Gil, el pasado 16 de agosto.

Ese documento describe que entre las funciones del Senado están: “Aportar los servicios parlamentarios que sean necesarios para la conducción de las sesiones del pleno”, detalla el inciso “G” del Convenio de Colaboración que suscribieron Mancera y Gil Zuarth. Pero en otro espacio del documento describe que para el cumplimiento del convenio éste estará sujeto a la “disponibilidad de recursos”.

A la solicitud, la Secretaría General de la Cámara de Diputados envió ayer a trabajadores para que apoyen hasta el domingo en lo que aprueban su reglamento y se define qué instancia será la que ayude con los servicios parlamentarios.

“No hay intervención”. En entrevista, el presidente de la Cámara Alta, Pablo Escudero (PVEM), reconoció que el Senado no puede otorgar los servicios parlamentarios hasta que la Asamblea Constituyente no cuente con un reglamento aprobado, pues tiene hasta el domingo para avalar su reglamento.

“Servicios parlamentarios, muy difíciles de dar, porque no hay reglamento y lo que no quiero es que digan que hay una intervención del Senado en el orden del día o en el acomodo de los temas. Ellos están para dar un apoyo respecto de las instrucciones que les den los decanos. No pueden hacer otra cosa diferente. No pueden acomodar el orden del día como en el Senado, porque no hay un reglamento”, detalló el legislador del Verde.

Agregó que el lunes firmó un oficio donde informa a los decanos que designó a seis trabajadores del Senado para que les brinden apoyo en los temas de la Secretaría General, entre otros asuntos, a las órdenes del presidente de la Asamblea Constituyente.

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