Laura Chinchilla, jefa de la misión de observación electoral de la Organización de Estados Americanos (OEA) para los comicios en México, en una reunión en el Senado reprobó la violencia por parte de grupos gremiales, dijo, que quieren utilizar a las instituciones mexicanas para dirimir sus preocupaciones, inquietudes o demandas.

En diálogo con senadores y diputados de la Comisión Permanente del Congreso de la Unión, Chinchilla dijo que confía en que no ocurran más alteraciones de la normalidad, y subrayó que es triste que grupos no representativos pretendan por la violencia secuestrar el voto en la elección del próximo 7 de junio.

El presidente de la Comisión Permanente, Miguel Barbosa Huerta (PRD), destacó la relevancia de que Chinchilla dé seguimiento al proceso electoral mexicano. La costarricense informó que encabeza a un grupo de observadores multidisciplinario de 62 personas, de 22 nacionalidades, quienes darán cobertura a los comicios en 18 estados del país.

Subrayó el prestigio internacional que goza el sistema electoral mexicano, y ante los hechos de violencia, dijo que tiene esperanza de que el proceso salga lo mejor posible.

Se refirió a los actos de violencia de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) y aunque no la mencionó por su nombre, reprobó las acciones que alteran la tranquilidad pública.

Chinchilla dijo que la misión observadora ha tenido conversaciones y coordinación con autoridades electorales y de seguridad de México, y “nos constan los esfuerzos que se hacen para garantizar un proceso fluido y que asegure la integridad de las personas que acudirán a las urnas”.

A los que alteran la tranquilidad, “tenemos que decirles que no es la vía de castigar y penalizar la democracia mexicana, ni que tengan muchos ciudadanos que renunciar al ejercicio del sufragio, en nombre de causas mucho más puntuales y mucho más veniales”, afirmó.

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