El secretario general de la Sección 22 de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), Rubén Núñez Ginez, aseguró que es mentira que se engañe a sus compañeros profesores para que no participen en el proceso de evaluación docente.

Para Juan José Ortega Madrigal, de la Sección 18 en Michoacán, al interior de la coordinadora se percibe una “amenaza del despido” con los procesos de evaluación iniciados por la Secretaría de Educación Pública (SEP) y el Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación (INEE).

“Hay gran inquietud de considerar el destino de la coordinadora y hoy más que nunca se concreta para muchos compañeros la amenaza del despido, por lo tanto, la insurgencia magisterial se está gestando con mayor fuerza”, aseguraron en conferencia de prensa realizada en las instalaciones de la Sección 9 de la organización.

Durante el encuentro con los medios de comunicación, el dirigente de la CNTE en Oaxaca, Rubén Núñez, acusó que lo que existe es “una campaña de desprestigio” en su contra y contra el movimiento magisterial.

“Nos conocen, es mentira que diga el gobierno que no nos tiene identificados, nosotros sabemos que desde el momento que fuimos nombrados, nos rastrean, nos tienen bien ubicados, pero nosotros hemos salido con la cara siempre limpia, con la frente en alto, para decirles, incluso con pruebas, cuál es nuestra percepción salarial, cuáles son nuestras condiciones de vida, dónde nos hospedamos, en qué viajamos. No tenemos ninguna cuestión que ocultar y mucho menos refugiarnos en algunas autoridades, en algunos partidos políticos, en gente que nos esté patrocinando”.

Más bien retó al gobierno a informar “de manera puntual y lo ratificamos, ojalá se pueda dar a conocer, que representamos a miles de maestros en todo el país”, insistió.

Ante ello, Ortega Madrigal, dirigente en Michoacán, señaló que “las situaciones actuales generan condiciones favorables para un proceso organizativo y de unión de fuerzas. Vemos el despertar de los contingentes del país, con ello la fuerza del movimiento organizado”.

Anunciaron que la coordinadora iniciará una nueva etapa de resistencia en contra de la reforma educativa, en el marco de lo cual se gesta la insurgencia magisterial con mayor fuerza.

En la reunión a la que también asistieron, entre otros, los dirigentes de la Sección 9 del Distrito Federal, Enrique Enríquez; Zenyazen Escobar, de Veracruz, y el dirigente de la Sección 18, Juan José Ortega rechazó “contundentemente la determinación de la Corte [sobre declarar constitucional la reforma educativa] y esperamos que en el tema de la retroactividad de la ley pueda haber justicia para el magisterio nacional”.

Informaron que se reforzará el plantón instalado en el Monumento a la Revolución, así como las movilizaciones en una fórmula que expusieron como “movilización-negociación”.

Luego de precisar que las marchas serán en varios estados, Rubén Núñez destacó: “Vamos a salir como CNTE, en unidad y reorganizados, no radicalizar, sino continuar la jornada de lucha, bajo nuestra táctica de movilización-negociación”.

Indicó que las protestas se harán de forma sincronizada en los estados de acuerdo con las características de movilización de cada entidad.

Los profesores insistieron en que seguirán con su rechazo a la evaluación docente, que consideran punitiva y que su objetivo es derogar la reforma educativa, así como la presentación con vida de los 43 estudiantes de la Escuela Normal Rural Raúl Isidro Burgos de Ayotzinapa, Guerrero, así como la libertad inmediata de presos políticos y compañeros detenidos.

Informaron que las acciones a realizar en los próximos días y semanas se definirán en la Asamblea Nacional Representativa (ANR) que se realizará el domingo, y adelantaron que no descartan ninguna forma de lucha.

Enrique Enríquez destacó que “hoy más que nunca se debe reconocer por parte del gobierno que los maestros han estado movilizándose siempre. Y en el aula también se hace la batalla, la lucha y ahí trabajamos para sostener al sistema educativo”.

Sobre lo establecido por la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), los dirigentes de la CNTE dieron a conocer que insistirán con los amparos, y de no prosperar, acudirán a la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH). Respecto a la suspensión del diálogo con la Secretaría de Gobernación, insistieron en que fue el gobierno federal el que rompió el diálogo.

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