El Gobierno de la región autónoma del Kurdistán iraquí condenó hoy el bombardeo llevado a cabo por Turquía contra un cuartel del Ejército kurdo, conocido como "peshmerga", que lo consideró un acto "inaceptable".

"Los ataques turcos son inaceptables", afirmó el ministerio del Ejército Peshmerga en un comunicado, en el que indicó que cinco de sus militares murieron y otros nueve resultaron heridos.

El ataque se produjo en los montes de Sinyar (norte), en una serie de bombardeos en los que los aviones turcos también golpearon posiciones en Irak del proscrito Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) y de milicianos kurdos en Siria.

El Ministerio afirmó que "todos los problemas" que ocurren en Sinyar se deben a la presencia del PKK en la zona e hizo un llamamiento a los combatientes de ese grupo para que se retiren, y "dar una oportunidad a la gente de reanudar sus vidas".

En el pasado, el ejército turco ha efectuado con frecuencia operaciones aéreas en el norte de Irak contra supuestas bases y campamentos del PKK, sobre todo en la región de los montes de Kandil, donde se habrían refugiado los líderes de esa guerrilla kurda en Turquía.

El Estado Mayor del Ejército de Turquía anunció hoy en un comunicado que su fuerza aérea bombardeó hoy objetivos de PKK en Irak y de las Unidades de Protección del Pueblo (YPG, en sus siglas en kurdo), las principales milicias kurdas en Siria.

En este último ataque, llevado a cabo en la zona de Karachok, cerca de la frontera con Irak, murieron al menos 18 personas, entre ellos tres activistas de un centro de información de las YPG y quince integrantes del grupo armado, según informó el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.

Google News

Noticias según tus intereses