Todo será un meticuloso trabajo de abordar autobuses, bajar y hacer trámites migratorios, subir a una aeronave, descender, efectuar otras gestiones migratorias, ingresar a otros autobuses, pasar una frontera de dos países, cumplir con las rutinas migratorias y continuar hasta la frontera de otras dos naciones…para finalmente iniciar un recorrido terrestre hacia Estados Unidos. Así será el mecanismo que a partir de hoy se pondrá a prueba para resolver la crisis de los migrantes cubanos.

Tras casi dos meses de conflicto, Costa Rica empezará hoy a desatorar un conflicto que se agravó en noviembre y diciembre pasados en sus fronteras con Panamá y Nicaragua con el masivo flujo irregular de personas nacidas en Cuba y, en un primer y crucial vuelo de prueba, un grupo de 180 migrantes cubanos retenidos contra su voluntad en suelo costarricense saldrá en un puente aéreo a El Salvador, para proseguir por tierra hacia Guatemala y México rumbo a su ansiada meta: Estados Unidos.

Sin descartar que el viaje se adelante o se atrase, el primer vuelo del plan piloto está previsto que despegue esta noche a las 22:25 horas, aunque en un inicio fue programado para las 22:55. La nave saldrá del aeropuerto internacional Daniel Oduber, de Liberia, la más importante ciudad del noroccidente de Costa Rica, hacia el aeropuerto internacional Monseñor Oscar Arnulfo Romero y Galdámez, en el sector surcentral de El Salvador, departamento de La Paz.

En un informe que entregó a EL UNIVERSAL el gobierno de Costa Rica, se precisó que el primer grupo saldrá a las 17:30 horas locales (mismo tiempo de la Ciudad de México) hacia el aeropuerto a bordo de autobuses desde el parque de La Cruz, un poblado limítrofe con Nicaragua, a unos 80 kilómetros al norte de Liberia y que mantiene en albergues al mayor número de cubanos migrantes.

El plan, agregó, es que se prevé la llegada de los autobuses al aeropuerto a las 19:15 horas. En el primer vuelo no viajarán menores de edad.

La directora de Migración y Extranjería de Costa Rica, Kattia Rodríguez, explicó a la prensa local que los detalles del viaje están siendo revisados y afinados, en un intercambio de listas con los demás países implicados en el proceso que avanza sin contratiempos.

El gobierno salvadoreño anunció esta mañana que se apresta a recibir al primer grupo. En una declaración que envió a este diario, el Ministerio de Relaciones Exteriores de El Salvador precisó que los 180 cubanos “posterior al respectivo trámite migratorio, continuarán su trayecto—por tierra—hacia la Frontera La Hachadura, ubicada en el departamento de Ahuachapán, que colinda con Guatemala”, y localizada en el sector suroccidental salvadoreño.

El programa definido principalmente por los gobiernos de Costa Rica, El Salvador, Guatemala, Honduras y México determinó que los cubanos serán traslados en autobuses de Ahuachapán hasta el puesto entre Frontera El Carmen, en Guatemala, y Talismán, en México.

Según el plan, las autoridades mexicanas les permitirán su ingreso con un salvoconducto aparentemente por 20 días, sin ningún cobro, pero sin que todavía esté confirmado si recibirán algún tipo de protección de parte de las autoridades de México en su tránsito a EU.

Los cubanos han expresado temores sobre su travesía por territorio mexicano luego de entrar por Talismán, porque les preocupa ser víctimas de los “coyotes” o traficantes de personas que les puedan agredir, retener o secuestrar y les obliguen a pedirles a sus parientes en EU que paguen grandes cantidades de dinero por cada uno como rescate. Según lo que ha trascendido de manera extraoficial, los cubanos deberán hacer el viaje por México por sus propios medios, por lo que algunos esperan viajar en avión de alguna localidad del sur mexicano hacia la zona norte, cerca de EU.

Para el trayecto que inician esta noche, los cubanos pagaron 555 dólares que incluyen 10 que cobra Guatemala por visa, 60 de impuestos de El Salvador y 29 de Costa Rica, vuelo especial o “chárter” de la aerolínea Avianca, autobuses, comidas y servicios médicos hasta la frontera guatemalteca--mexicana.

Los ministros costarricenses de Relaciones Exteriores, Manuel González, y de la Presidencia, Sergio Alfaro, son esperados esta noche en el aeropuerto de Liberia para participar en el inicio de la operación. González ha dicho que el primer vuelo es fundamental y de la mayor importancia para resolver una crisis que ha obligado a Costa Rica a asumir millonarios gastos de mantenimiento y protección médica y de otras características para los cubanos localizados en albergues y otros sitios en este país.

Del vuelo de prueba depende que en los próximos días, quizás a inicios de la próximo semana, pueda organizarse un segundo vuelo y así sucesivamente para poder sacar de Costa Rica a los siete mil 802 cubanos varados en suelo costarricense y cuyo único objetivo es llegar a EU, a acogerse a la Ley de Ajuste Cubano, promulgada en 1966 y que concede privilegios migratorios inmediatos—autorización de residencia y de trabajo—a las personas oriundas de Cuba.

El grave conflicto migratorio estalló el 13 de noviembre del año pasado, porque Nicaragua decidió cerrar sus fronteras terrestres a lo que inicialmente era cerca de un millar de migrantes irregulares cubanos que se trasladaron de Panamá a Costa Rica, pero desde esa fecha el número siguió creciendo de manera incesante. Managua alegó que esos cubanos son delincuentes y representan una amenaza a su seguridad y el 15 de diciembre lanzó tropas de su Ejército que les atacaron cuando pretendieron penetrar la fuerza a suelo nicaragüense.

En un fenómeno que aumentó sin control en 2015, los cubanos aprovecharon que Ecuador les eximió de visa desde 2008, viajaron legalmente de Cuba a ese país e iniciaron el recorrido sin visas hacia EU para acogerse a la ley de 1966.  El movimiento, que transcurrió sin mayores contratiempos al incrementarse en especial a partir de 2012 y con la entrega de permisos temporales de paso a los cubanos en varios países de la ruta, creció por temor a que, por el deshielo Estados Unidos—Cuba desde 2014, Washington derogue esa ley.

Por la crisis, Quito les restableció la visa a partir del 1 de diciembre pasado. Costa Rica les cerró indefinidamente sus fronteras con Panamá el 18 de diciembre y advirtió que los que entren por vías ilegales serán deportados a Cuba.

ahd

Google News

Noticias según tus intereses