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Cuautitlán Izcalli, Méx.— El combate a la corrupción provoca ataques al gobierno municipal, dijo el alcalde Víctor Estrada Garibay, en alusión al asesinato de Zoé Zambrano García, director de Administración del organismo Operador de Agua Potable (Operagua) municipal, ocurrido el pasado 18 de junio.

“Hay fuerzas en el municipio que creen que la amenaza, el ataque y el miedo son una forma de frenar el cambio que los perjudica. Sin embargo, este gobierno está convencido de que el cambio requiere de constancia, visión y pasión por lo que se está haciendo, y un gobierno con valores trabaja por el bien superior, por graves y dolorosas que sean las consecuencias de atacar la corrupción”, dijo.

Estrada Garibay encabezó la ceremonia del aniversario 43 de Cuautitlán Izcalli como municipio, donde advirtió que “el cambio genera esperanza, pero también multiplica resistencias”.

La mañana del pasado 18 de junio fue asesinado, de un disparo de arma de fuego en la cabeza, Zoé Zambrano García, director de Administración del Operagua, quien era colaborador cercano a Estrada Garibay.

La mañana de ese día, trabajadores municipales iniciaban una jornada de limpieza en la Sección Parques, en el centro urbano de Cuautitlán Izcalli, cuando un hombre se acercó y disparó contra Zambrano García, lo que le causó la muerte en el sitio.

El hombre abordó un automóvil, donde un cómplice lo esperaba, y ambos huyeron hacia la autopista México-Querétaro, sin que fueran detenidos y sin que se haya hecho público si los hechos quedaron grabados en videocámaras de vigilancia.

Antes, Gabriel Ezeta Moll, primer presidente municipal de Cuautitlán Izcalli, lamentó la “violencia asesina que mancha no sólo el pavimento, sino una convivencia que debe ser pacífica y segura”.

Posteriormente Estrada Garibay rechazó hacer comentarios en relación al homicidio de su colaborador.

“El procurador me ha pedido ser muy prudente en ese tema y ellos serán quien, a través de su área de Comunicación Social, informen los avances”, dijo.

No obstante, destacó que “es un acto que me indigna, del cual estoy muy molesto. Nos indigna a todos”.

La ceremonia de aniversario de Cuautitlán Izcalli se realizó con un riguroso dispositivo de seguridad e incluso la explanada municipal fue cercada totalmente con vallas metálicas, custodiadas por policías.

El diputado local Raymundo Guzmán Corroviñas, del PAN, calificó el crimen de lamentable y “más por la circunstancia en que se da, a plena luz del día, en el centro urbano y con muchos servidores públicos en una jornada. Desafortunadamente en Izcalli están pasando cosas y no son tiempos de tocar las campanas al vuelo, sino de ponernos a trabajar y dar resultados”.

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