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Como parte de la limpia que ordenó el jefe de gobierno, Miguel Ángel Mancera, al interior del Sistema Penitenciario Capitalino, después de que se fugaran del Reclusorio Oriente los peligrosos secuestrados Agustín Miranda Orozco y Roberto Sánchez Ramírez, la tarde del miércoles se dio a conocer el relevo de los responsables del Módulo de Alta Seguridad Diamante y del Reclusorio Preventivo Varonil Oriente.

Esto, según la dependencia capitalina, para facilitar las investigaciones que realiza la procuraduría local a prácticamente todo el personal de ambos inmuebles, pues se busca descubrir hasta dónde llega la red de corrupción y complicidad que permitió la fuga el 30 de mayo pasado; en tanto, ya fueron citados a declarar el subdirector del Reclusorio Preventivo Oriente, Raúl Cano Escalera así como 25 empleados de diferentes departamentos por su posible participación en este hecho.

El Sistema Penitenciario dio a conocer también que se garantiza la seguridad, pues mientras se designan a los nuevos guardias, personal capacitado —de la misma dependencia— está al frente de esta área.

La subsecretaría informó que trabaja de la mano con la procuraduría capitalina para determinar la responsabilidad de sus funcionarios en la fuga de los dos internos del Módulo de Alta Seguridad, que escaparon por la zona de túneles y juzgados del Reclusorio Preventivo Varonil Oriente, así como para lograr su captura.

Se dio a conocer que nuevamente se aplicarán exámenes de control de confianza a todos los custodios, así como a mandos medios y altos de todas las cárceles, estas pruebas incluyen al propio subsecretario, Hazael Ruiz Ortega y a los directores de los reclusorios, quienes a pesar de los incidentes que han ocurrido durante este año se mantienen al frente de los penales locales.

La investigación que encabeza la procuraduría se extendió hacia personal del Tribunal Superior de Justicia de la Ciudad de México. Hasta el momento se han entrevistado con tres encargados de área, desde el responsable del archivo por donde escaparon los secuestradores, personal de vigilancia y de intendencia, que eran los únicos que con frecuencia ingresaban a ese lugar; sin embargo, hasta el momento no han encontrado pruebas para fincarles alguna responsabilidad.

La investigación también se ha centrado en el primer círculo familiar y de defensa de los ahora prófugos. Destaca que no han podido localizar a la abogada de Agustín Miranda, de nombre Irma Porras, quien aparentemente pudo participar en la fuga al proporcionarle información de cómo poder atravesar los juzgados sin ser detectado e, incluso, de proporcionar el auto en el que pudieron escapar.

Hasta el momento sólo se les ha dictado el auto de formal prisión a los custodios Jesús Peña Cid y Juan Casados Gutiérrez, quienes fueron imputados por el delito de evasión de preso agravado. La jueza 43 Penal, Diana Carmona Rosete, consideró que existen los elementos suficientes para que continúen el proceso en prisión y como parte de la investigación se les interroga para determinar quienes más participaron en la fuga.

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