Yuatepec.— Los padres de los cuatro estudiantes asesinados el pasado 2 de noviembre realizaron una misa en el ejido conocido como El Caracol, de la colonia la Nopalera, donde quedaron tendidos los cuerpos de Melesio, Alejandro, Francisco y Emiliano.

“Entre tus manos está mi vida Señor, hay que vivir para morir”, cantaban los familiares y amigos, de los estudiantes de la preparatoria 4 de Jojutla, perteneciente a la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM).

En el lugar también colocaron cruces elaboradas con flores y prendieron veladoras como un símbolo de la luz que guiará las almas de los jóvenes. “Ya te llevamos a casa”, dijo una de las madres a su hijo, al tiempo en que agregó que siempre estarán juntos.

En la entrada de ese lugar despoblado fueron colocadas cuatro cruces de madera con los nombres de los preparatorianos, uno de 15, dos de 16 y uno 17 años, el cumpleañero.

El pasado 2 de noviembre fueron encontrados los cuerpos de los estudiantes. Al día siguiente después de la misa de cuerpo presente, que se realizó en la cancha de usos múltiples de la preparatoria, fueron sepultados.

El jueves, los estudiantes marcharon por las principales calles de Jojutla, para exigir a las autoridades justicia por la muerte de sus compañeros.

Ayer, se realizó la audiencia de vinculación a proceso, contra los imputados Iván “N”, Carlos “N” y Luis “N”.

Ellos son tres de los cinco hombres detenidos por su presunta participación en el homicidio de los estudiantes y de acuerdo con un comunicado de la Fiscalía del Estado, los otros dos varones imputados de colaborar en el cuádruple asesinato —identificados como Víctor Manuel “N” e Iván “N”— fueron vinculados a proceso penal por el delito contra la salud en agravio de la sociedad y contra la salud en su modalidad de posesión de cocaína con fines de comercio, respectivamente.

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