El Partido Democrático Popular Revolucionario (PDPR), brazo político del Ejército Popular Revolucionario (EPR), mediante un comunicado se pronunció en contra de la reforma educativa, que calificó de neoliberal, porque responde solo a los intereses de empresarios y políticos del sistema actual de gobierno y señalan a militares y policías, que aún no pierden su raíz popular, que “están a tiempo para no manchar sus manos con sangre del pueblo”.

El grupo armado en el documento dirigido al pueblo de México, a los pueblos del mundo, a la prensa, a los organismos defensores de los derechos humanos y al magisterio, entre otros, aseguran que la lucha del magisterio democrático es legítima, porque expresa la voluntad popular en contra de la privatización de la educación y por la lucha del pueblo que aseguran poco a poco, adquiere conciencia de la defensa de sus intereses.

Y aseguran que la reforma educativa que califican de neoliberal, solo será frenada a través de la organización de la resistencia popular combativa, porque aseguran que las reformas estructurales, en esencia son antipopulares y pro oligarcas, por sus objetivos y contenidos para continuar expoliando al pueblo y procurar la defensa de los intereses oligárquicos, monopolistas y transnacionales, “como es el caso de la reforma educativa, cuyo objetivo principal es anular la educación al pueblo”.

Lo anterior porque sostienen en su documento que la reforma educativa tiene un carácter cientificista, porque reduce a la ciencia a solo cuestiones técnicas y pragmáticas, que buscan generar “un sujeto cretino, ignorante, sumiso, servil e insensible a la explotación y opresión del pueblo al ponderar por sobre todo, los intereses económicos de un grupúsculo de oligarcas insaciables y pro fascistas”.

Agregan que el movimiento magisterial, apoyado por el pueblo, son las enseñanzas políticas organizativas de lo que definen como “la escuela magisterial popular de verano,, y que queda escrito en cada pizarrón popular, que el actual movimiento popular estudiantil, debe ser del tamaño de la ofensiva oligárquica”.

Y aseguran que le queda claro al pueblo esa enseñanza que está a la vista que ante la represión, toda forma de lucha es legítima, válida y necesaria, “si el estado labra represión , el pueblo debe forjar por todo el país, las trincheras de la resistencia popular y combativa”.

Por su parte, señalan en ese escrito enviado a la prensa que por su parte, “desde esta trinchera de las armas, vaya un saludo para todos aquellos que libran combates populares contra el poder burgués y la voluntad oligarca, que cada cual en sus trincheras levanten en alto las banderas de la voluntad popular, porque si para el pueblo no hay paz, cuando éste adquiere conciencia de la defensa de sus intereses, tampoco las habrá para los responsables de la opresión y la represión”.

Terminan su posición en torno a la reforma educativa con las siguientes consignas: “Juicio y castigo a los criminales de estado”, “Vivos se los llevaron, vivos los queremos”, “Libertad a todos los presos políticos de conciencia”, “Por la revolución socialistas”, “Vencer o morir”, “Por nuestros camaradas proletarios. Resueltos a vencer”, “Por la guerra popular” y “con la guerra popular, el EPR triunfará”, y firma el PDPR.


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