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Villahermosa.— Seis lesionados, nueve detenidos, un vehículo dañado y más de 30 toneladas de frutas perdidas es saldo que arrojó un enfrentamiento entre tianguistas de la Central de Abasto de Tabasco y la Policía Estatal, luego de 15 horas de permanecer cerrado en el centro de distribución.

El conflicto comenzó desde la noche del martes, cuando bodegueros cerraron el centro de abasto en protesta porque supuestamente la administración subió los costos de sus servicios, como la tarifa para el ingreso de camiones con frutas y las cuotas de derecho de piso.

Los bodegueros bloquearon por varias horas el periférico de la capital para impedir el paso a los automovilistas, lo que ocasionó caos vial, ya que es una de las arterias de mayor circulación.

Según el comerciante Humberto Martínez, antes a los tráileres les cobraban 100 pesos y a las Pick Up 20, pero ahora les quieren cobrar 400 y 50 pesos, respectivamente.

Al paso de las horas el conflicto creció, y la mañana del miércoles los inconformes iniciaron un diálogo con el administrador de la Central de Abasto, Abenamar Gómez Leyva, quien salió de las oficinas resguardado por policías antimotines, en medio de abucheos de comerciantes, sin embargo no hubo acuerdos y le exigieron que renunciara.

Entonces un grupo de supuestos vendedores inició el enfrentamiento con los policías estatales, quienes primero se replegaron, pero minutos después ingresaron con gases lacrimógenos para tomar el control de las instalaciones de la Central de Abasto.

Los tianguistas no sólo golpearon a los elementos de seguridad, sino también a algunos reporteros.

Al final del enfrentamiento un policía resultó herido y hubo nueve detenidos.

Sobre el conflicto, el gobernador del estado, Arturo Núñez Jiménez, se dijo dispuesto al diálogo, pero aclaró que no a base de agresiones y menos de alcoholizar personas y utilizarlas para expresar una inconformidad.

“No es necesario bloquear, obstruir o afectar a terceros, perjudicar y menos alcoholizar personas y utilizarlas para estos aspectos, una cosa es la tolerancia y otra cosa es el libertinaje con el que algunos pretenden manejar y manipular su protesta, vamos a garantizar el Estado de derecho a la sociedad tabasqueña, vamos a estar atentos a todas las demandas, pero hay canales institucionales”, señaló el mandatario.

El conflicto que mantuvo cerrada por más de 15 horas la Central de Abasto dejó perdidas por cerca de 10 millones de pesos, según las estimaciones de bodegueros, comerciantes y clientes.

Simón Romero Herrera, presidente de vigilancia de Central de Abasto, dijo que tan sólo en 43 de las 80 bodegas registraron una pérdida de 30 toneladas de frutas y legumbres, además de 800 toneladas de frutas que no se vendieron a tiempo.

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