Unos 30 padres y familiares de los 43 estudiantes desaparecidos de Ayotzinapa, participaron en esta ciudad en un acto de protesta y para refrendar que no cesarán en la búsqueda de sus seres queridos, y llegarán hasta las últimas consecuencias para que se haga justicia y se castigue a los responsables.

Don Mariano señaló que en este peregrinar de un año y cinco meses de búsqueda incesante, ha sido un periodo de muchísimo dolor, pero también de mucha esperanza y aprendizajes, pues han visto y comprendido que solo el pueblo puede ayudar al pueblo y que para enfrentar cada injusticia el pueblo debe estar unido, sintiendo el dolor de los otros como propio, así como a ellos les duelen los 43 y los 27 mil desaparecidos en todo México.

Congregados en la Plaza de  Colegio Civil, donde estuvieron unos 150 asistentes, que encendieron 43 veladoras, junto al retrato de cada uno de los estudiantes de Ayotzinapa.

Pidió Don Mario que nadie espere a que le desaparezcan un hijo o un familiar para decir ya basta, e insistió que la exigencia para que se acaben este tipo de hechos es al gobierno, porque a lo largo de estos 17 meses de lucha y búsqueda, han aprendido que no hay delincuentes independientes, porque detrás de cada uno de ellos hay un político.

Axel, estudiante de segundo grado de la normal rural, dijo que los padres de los desaparecidos quisieran estar en sus comunidades y el preferiría estar preocupado por cumplir con sus tareas, pero no van a cejar hasta encontrar a los 43 y pidió a quienes no los apoyen que respeten su lucha, porque ni los padres pidieron que desaparecieran a sus hijos ni los estudiantes merecían esto, aunque fuera cierto que no lo es que iban a fastidiar un evento del alcalde de iguala, pues hubiera bastado que la policía los encapsulara, pero el objetivo era y es terminar con las escuela rurales.

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