Con música de banda de viento, el tronido de cohetones y las oraciones de más de 500 personas que se unieron al cortejo fúnebre, se les dio el último adiós a tres de los seis guanajuatenses asesinados el 4 de febrero pasado en Chicago.
En la parroquia de San Isidro Labrador, de la comunidad de La Noria de este municipio, el obispo emérito de Morelia, Alejo Zavala Castro, ofició una misa de cuerpo presente y expresó indignación por el crimen que privó de la vida a los seis integrantes de una familia guanajuatense.
La tarde de este lunes, vecinos y familiares cargaron en hombros los ataúdes con los cuerpos de Rosaura Hernández Vega, su esposo Noé Martínez y su hijo Noé Martínez Hernández, hasta en el panteón de la comunidad de La Noria.
Los féretros fueron cubiertos de arreglos florales, moños y fotografías de ellos en vida.
Con palabras amorosas, Violeta Martínez Hernández despidió a sus padres y a su hermano, y a Dios le pidió fortaleza en estos momentos tan difíciles.
“Qué Dios los bendiga y los tenga en su santo reino. Me quedo con todos los recuerdos, más hermosos, que Dios los tenga en su santa gloria y que me mande las fuerzas para seguir adelante porque en este momento yo no puedo”, expresó.
Al término de la celebración religiosa en la Parroquia de San Isidro Labrador, el obispo externó condolencias de parte del Cardenal Alberto Suárez Inda, y más adelante condenó el asesinato de la familia de migrantes guanajuatenses.
“Unas palabras de esperanza, resignación y fortaleza a los familiares y pobladores de Tarimoro”.
La madrugada de este lunes llegaron los cuerpos de los tres migrantes para ser velados en el salón parroquial.
El pasado 4 de febrero fueron encontrados sin vida seis integrantes de la familia de migrantes originarios de Tarimoro, en la vivienda que habitaban en el vecindario de Gage Park, en la ciudad de Chicago, Estados Unidos, cinco con heridas de armas blanca y uno con lesiones de arma de fuego.
Los cuerpos de Herminia Martínez Hernández y de sus dos menores hijos serían trasladados a Morelos, en donde el padre de los menores les daría sepultura.
Al sepelio acudieron el alcalde de Tarimoro, Rafael Ramírez Tirado, el secretario de Desarrollo Social y Humano del estado, Diego Sinhué Rodríguez Vallejo, en representación del gobernador para expresar sus condolencias a los deudos.
Expresó su pésame a la señora Violeta Martínez Hernández y le aseguró que en el ámbito de las facultades del gobierno de Guanajuato se hará todo lo que sea necesario para pedir que las investigaciones en Chicago, Estados Unidos, no se detengan y se haga justicia.
jram