Cuernavaca.— El asesinato de menores de edad a manos de sus padres o padrastros crece en Morelos. Ahora un juez oral ordenó privar de la libertad por 45 años a un hombre que mató a su hijastro de ocho meses, informó la Fiscalía General del Estado.

El martes también fue sentenciada una pareja que mató a su hija y después la sepultó de forma clandestina en el patio de su casa; el hombre fue sentenciado a 72 años de prisión y la mujer a 48 por los delitos de encubrimiento e inhumación.

Una semana antes, Érika “N” fue vinculada a proceso por el homicidio de sus dos hijos de uno y seis años, respectivamente, ocurrido el pasado 26 de septiembre en su domicilio ubicado en el poblado de Ocotepec.

El caso más reciente involucra a Diego Érick Silva Sánchez, padrastro de un menor de ocho meses.

La fiscalía informó que en enero pasado el procesado se encontraba con la madre y el niño.

Cuando el bebé lloraba, “lo tomó en brazos y cerca de 20 minutos después regresó y se lo entregó a la madre con diversas lesiones, por lo que ésta lo llevó al hospital general de Cuautla”.

Días después, el menor perdió la vida a consecuencia de un traumatismo craneoencefálico severo, por lo que la madre inició una denuncia en contra de Érick Silva por el delito de homicidio calificado.

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