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El entretenimiento actual, la televisión y el cine están dominados por superhéroes, reality shows y narcoseries.

No obstante existen proyectos como el programa La dichosa palabra que, pese a no contar con un gran presupuesto, ha logrado mantenerse en el gusto de personas de diversas edades. Muestra de ello es que hace unos días comenzó la transmisión de la temporada 14 del emblemático programa de Canal 22.

Uno de sus conductores, Eduardo Casar explicó que en un mundo de redes sociales y de una fascinación por los efectos especiales, es un logro que el programa que conduce junto a Germán Ortega, Pablo Boullosa y Laura García llegue a 14 años al aire.

“Los más sorprendidos por estos años somos nosotros, nunca creímos que el programa se mantendría al aire tanto tiempo, hemos pasado dos sexenios presidenciales y nos gusta creer que muchas generaciones han sido parte de este programa”, señaló Casar a EL UNIVERSAL.

Casar afirmó que este programa ha logrado romper la barrera entre cultura y entretenimiento gracias a la personalidad tan dispar de sus integrantes y al conocimieto tan diverso que se maneja dentro del programa, pues aunque saben que son un referente de la televisión pública cultural, jamás se han visto como instituciones del lenguaje y el conocimiento.

“Creo que el programa se ha mantenido porque apela a cosas básicas en el ser humano, como el lenguaje. Las entrevistas o conferencias suelen ser aburridas pero como nosotros somos incompletos, no sabemos todo, entonces se arma una mesa de conversación”, apuntó.

Esto ha hecho —en palabras de Eduardo— que el contenido de la transmisión sea para cualquier sector social, algo que pocas veces se puede decir de un programa cutural.

“A las personas de cualquier clase social le interesa cómo hablan los demás, porque el habla está cargada de afectividad, entonces sí puede haber entretenimiento en eso, me gusta pensar que hemos ayudado a que la gente se acerque a la cultura”, indicó.

El conductor señaló que pese a no contar con gran presupuesto, año con año, el programa busca renovarse y buscar ideas para mantenerlo entretenido y fresco. Es asi que este año se tiene la intención de articular un diccionario visual, una serie de cápsulas de un minuto sobre algunas palabras que correspondan a diversos oficios y profesiones. Casar expicó que se trata de que cualquier persona, con cualquier profesión, les proporcione el léxico básico cotidiano usado en su gremio.

“Buscamos integrar el lenguaje que utilizan ellos a nuestro propio vocabulario para, en su momento, hacer uso de ellas y así saber qué pedir o cómo nombrar a las cosas y dejar de usar esa especie de palabras comodín o vacías como: ‘la cosa esa que está sobre el ese’”, añadió Eduardo.

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