El grupo tapatío  de pop folk, Espumas y Terciopelo, hace un recordatorio para ellos mismos: vivir despacito, a través su nuevo disco.

“Debemos disfrutar de las cosas simples de la vida y admirar lo que hay a nuestro alrededor”.

La banda surgió después de que Maricha Elizundia y Memo Andrés se conocieron en una tocada.

“Nos juntamos porque Andrés tenía una banda. Después lo busqué para que me diera clases de guitarra. Nos fuimos a San Cristóbal de las Casas, Chiapas y como nos queríamos quedar más tiempo ahí, comenzamos a tocar en bares para juntar dinero y comenzamos tocando   boleros”.

El nombre de la agrupación viene de una canción de Tin Tan,  llamada “Amarraditos” que dice : “Vamos agarraditos los dos; espumas y terciopelo”.

“Trata de una pareja que jugaba a ser antaña.  Y es lo que nos pasa a nosotros; la gente nos dice que cómo es que jóvenes como nosotros toquemos música del pasado. Es con lo que crecimos”, señalan los músicos.

En su primer álbum de estudio,  Maricha y Memo quisieron que “sonara a madera”, ahora con este disco Vive despacito “dejamos que las canciones sonaran a lo que quisieran sonar. En este disco ya metemos instrumentos como la guitarra eléctrica, a diferencia del primero, que era más natural”.

Aunque el disco es una invitación a vivir  más relajados, algunas canciones fueron escritas con un poco de enojo, como “Mecha corta”, que resultó de la molestia   con un colega.

Espumas y Terciopelo  espera con esta producción  volver a los lugares a los que ya ha ido, como Uruguay, para que más gente los escuche.

El próximo 12 de marzo será la presentación de Vive despacito en el Foro Hilvana, a las 21:00 hrs.

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