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“Todos tenemos fantasmas. Son emociones que guardas bajo llave porque no te hacen sentir bien, pero cuando consigues sacarlos en una canción es una experiencia completamente liberadora”, afirma Timo Pacheco, cantautor y guitarrista de la banda de ska Los Victorios.

Timo se atrevió a confesar todo lo que durante muchos años le dolía o le enternecía. El resultado es el Cancionero Fantasma, su primer disco como solista tras 21 años de carrera en los escenarios.

Muchos te dicen que si estás dolido o deprimido mejor evites detonantes que hagan sentir triste o nostálgico, pero cuando menos lo notas ¡explotan en una canción de José José o de José Alfredo Jiménez!, explica.

“Entonces el mensaje del Cancionero es liberar esas emociones (fantasmas) pero no para instalarte en la depresión sino para usarlas para convertirlas en fortalezas”, expresa.

En entrevista con EL UNIVERSAL, asegura que los compositores son “cazadores de emociones”. Por lo que tienen la responsabilidad tomar el sentimiento de una persona, hacerlo suyo y traducirlo en canciones.

Sin embargo, si a la gente le gusta o le impacta, “la rola deja de pertenecerte. Es muy emocionante cuando cantas algo que escribiste y al público y le provoca besar, llorar o saltar de alegría”.

Timo también es sicólogo y practicante de aikido. La decisión de sacar su disco llegó tras sufrir un accidente en el que casi pierde la vida y con el pronóstico de que no podría tocar jamás la guitarra, etapa que logró superar, por lo que desde entonces considera que cada momento es un “regalo total”.

El disco de Timo Pacheco, producido por el argentino Manu Moreno, tiene también un mensaje social aunque no manifiesto: hacer las cosas distinto.

“El mundo está aburrido. Si con una canción consigo que mil mentes tomen un mensaje creo que es un gran objetivo”, finaliza.

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