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Los nuevos rockstar son los vlogueros, afirma el cantante Paulino Monroy, quien busca que lo vean como quien escribe canciones sin pensar en colocarse dentro un género definido. Su idea es clara: convertirse en el cantante que se distinga del resto por su calidad en el momento más difícil de la industria discográfica.

“Me gusta pensar en ser famoso y exitoso para poder seguir solventando la carrera del músico y poder vivir de esto, pero nunca fue mi primer objetivo. No por estar en un gran concierto voy a pensar que soy el rey del mundo o me voy a perder en las drogas, es la consecuencia de mi profesión que asumo como algo que me gusta”, contó en entrevista.

Aunque su carrera despuntó en Guadalajara lleva algún tiempo radicado en la ciudad de México tras tocar puertas muchos años; ahora que ha logrado introducirse en la escena afirma que es muy aterrizado ya que valora las cosas esenciales como la salud o la naturaleza, por lo que siempre estará en pro de causas que la cuiden.

“Nadie me ha regalado nada, vengo de una familia de clase media en Guadalajara y no tengo un padrino, lo he logrado por estar de terco. Me ha costado y es por eso que lo disfruto”.

Tras dos álbumes de manera independiente lanzará al mercado (10 de julio) su disco debut en una discográfica transnacional titulado Larga Duración, que fue grabado en Nueva York. Del él se desprende el sencillo “Disparaste a matar”, tema del que recientemente grabó el video del cual es protagonista el actor Kristyan Ferrer (Guten Tag Ramon).

“Los procesos quien sabe si son los correctos o no pero son los que son, ha sido muy lento (lanzó sencillo por sencillo) pero hacer las cosas apresuradas no está bien. Que mi disco llegara a las tiendas fue lo que yo soñé, no solamente tener un grupo de fans en Facebook”, argumentó.

Y es precisamente este tipo de plataformas de las que dice, la labor no es quedarse ahí sino tratar de conquistar y rebasar fronteras al pisar escenarios y viajar, como lo ha hecho a Chile, Argentina o Colombia.

“Siento que las redes sociales no alcanzan, se volvieron totalmente maleables y manipulables. Hay que verlos como un medio de comunicación que te acerca a la gente a la que le tienes que contestar porque seguramente vas a ganar un fan”, dice.

Para su concierto el próximo 31 de julio en el Lunario del Auditorio Nacional prepara la presentación de Larga Duración, además de algunos covers. “Me impone poder llenarlo, pero quiero que la gente no sólo me vea tocar sino tratar de montar un espectáculo para robar emociones”.

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