La aplicación Whisper, la cual permite hacer confesiones de forma anónima con otros usuarios, se ha convertido en refugio para los empleados de los parques temáticos de Disney, de acuerdo con un artículo del diario Daily Mail. Las publicaciones permiten conocer un poco más de cerca los pros y contras de su trabajo, que a menudo es visto como "de ensueño". 

Algunos aseguran que el trato con niños es una experiencia satisfactoria y el trabajo no podría ser más divertido; incluso uno de ellos pidió prestado un disfraz de Mickey para pedir matrimonio a su pareja. En cambio, otros ven su rutina como "una forma de saber cómo no debo educar a mis hijos". Un usuario confesó que bebe un poco de alcohol antes de sus turnos para comportarse de forma más entusiasta. 

La prohibición de tener tatuajes, piercings, o pintarse el cabello de colores llamativos, es un gran inconveniente para muchos empleados. Antes de interpretar un personaje como las princesas, las medidas son muy estrictas: deben tener la altura y complexión adecuados. Además, no deben salirse jamás de su caracterización mientras estén en horas de trabajo. Deben mantener su actitud, expresión corporal y comportamiento tal como el personaje lo requiere. Esto se vuelve especialmente difícil cuando los turistas son groseros o sus hijos, impertinentes. Una de las "princesas" se quejó en la red social porque cada vez que una celebridad visita el parque donde trabaja, es imposible emocionarse o actuar como una fanática lo haría.

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