Álbum salda deuda con Angélica Morales

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Hoy en día, sentencia el crítico musical Lázaro Azar, nadie recuerda a la pianista mexicana Angélica Morales von Sauer, salvo por el concurso de piano que lleva su nombre. Además, lamenta que por la renuencia que tuvo para grabar, tampoco había sido posible escuchar sus interpretaciones. La deuda que se tiene con el legado musical de la artista se ha saldado con el álbum Angélica Morales von Sauer. Vislumbrando su gloria sonora, conformado por cuatro discos donde se rescatan grabaciones que se encontraban en cintas de carrete, custodiadas en la Biblioteca de las Artes del Centro Nacional de las Artes.

“Cuando era niño vi en la televisión un concierto en el que ella tocaba sonatas de Beethoven... Me impresionó mucho; yo tenía sólo seis años. No tuve el privilegio de escucharla en vivo y creo nadie de las jóvenes generaciones de pianistas la conoció. Es un nombre que no les dice nada a los jóvenes”, dice Azar, pianista y curador de la edición, quien asegura que de no ser por el certamen pianístico creado en 1995 por el INBA con su nombre, la figura de Morales estaría práctica e injustamente olvidada.

Con este disco, apunta, será posible escucharla dando testimonio de un nivel técnico quizás nunca igualado por otro mexicano.

“Estas grabaciones estuvieron perdidas tanto tiempo porque no sabíamos que existían. Fueron hechas para otro fin, quizá si Morales viviera me estaría mentando la madre por haber sacado a la luz las cintas que hizo para que sólo ella las escuchara. Son cintas que alguien podría decir que son versiones de estudio, que se oyen aplatanadas y que en vivo las tocaba mejor; pero son los archivos que nos muestran la forma en la que estudiaba, eso es invaluable. Es asomarnos a un momento de mayor intimidad: una artista trabajando lo que iba a hacer ante el público”, indica.

El primero de los discos del álbum reúne a un par de compositores fundamentales: Bach y Liszt. Las tres partituras incluidas en el segundo disco corroboran su afinidad emocional y apego estilístico hacia Beethoven. En el tercero y cuarto volumen están sus interpretaciones de compositores como Chopin, Brahms, Ravel, Villa-Lobos, Prokofiev, Saue y Sain-Saëns.

Además se prepara un micro sitio dedicado a Morales en la Fonoteca Nacional.