Paramore reúne a diferentes generaciones en concierto

Luego de cuatro años de ausencia, el grupo Paramore de encargo de complacer al público mexicano la noche de ayer en el Palacio de los Deportes. Hayley Williams y compañía arribaron al escenario en punto de las 21:15 horas en un recinto que si bien no estaba a reventar, logró reunir a 16,336 personas de distintas edades.

El grupo originario de Franklin, Tennessee, comenzó la noche con temas como Hard Times, Ignorance, Still Into You y Daydreaming , que con los movimientos de la vocalista que brincaba de un lado a otro y acompañados de una pantalla cuadrada a sus espaldas que se iluminaba de la orillas y que vibraba con tres círculos interiores al compás de los acordes de la música, consiguieron la atención de los presentes.

Con 13 años de carrera, la banda hizo un recorrido por varios temas que los han mantenido en el gusto de la gente. Chicas pintadas con el cabello de colores, así como sudaderas que portaban con el grabado de Tour Two, el nombre de su actual gira, se lograban ver entre el público, quienes coreaban cada una de las canciones entre brincos de principio a fin.

Si bien el grupo logró conquistar en el pasado a los adolescentes, su concierto hizo evidente que han logrado romper esa frontera, ya que así como había gente veinteñera, también lograron juntar a los adolescentes actuales.

Otras canciones que conformaron parte de su repertorio fueron Brick by Boring Brick y Playing God. Además de estar en el escenario Taylor York y Zac Farro, guitarrista y bajista respectivamente, la banda de hizo acompañar de otros cuatro músicos de apoyo.

"¡Hola buenas noches Ciudad de México! Somos Paramore, ha pasado mucho tiempo y los extrañamos mucho. Sólo tengo una pregunta para ustedes, ¿trajeron sus zapatos de baile esta noche? Porque es tiempo de bailar", fueron las primeras palabras que Williams, su vocalista, compartió al micrófono antes de interpretar That's What You Get, quién vestida con falda corta y playera negra bailó con sus fans desde el escenario.

La noche siguió con otras canciones como Caught Myself, luego Williams tomaría nuevamente el micrófono para exclamar. "¡Gracias, muchas gracias! ¿Cómo se sienten? La Ciudad de México, háganme un favor y denle un aplauso a PVRIS", quienes fueron sus teloneros.

"Está es la última parada de Tour Two, así que esto es como un Tour Two 2.5, muchas gracias por cantar con nosotros. Nos hemos divertido mucho y hemos bailado esta noche pero creo que es momento de algo un poco triste así que ataquemos directamente eso", diría antes de interpretar Hate to See You Hearth Break, con lo cual consiguió que el público encendiera las luces de sus celulares y alzaran sus brazos al mismo tiempo que la cantaban con ella.

"¡Muy bien Ciudad de México! Metamonos bien profundo en nuestros sentimientos ahora. Antes de que avancemos con este show, está es la primera vez que venimos a México en mucho tiempo. He pasado por mucho últimamente, no sabíamos que esperar cuando venimos, y ustedes son tan increíbles como siempre".

"Creo que solo quería tomarme un momento para celebrar el estar aquí, de poder celebrar la música y el estar viva con ustedes", continuaría Hayley sentada en una silla y en compañía de una sola guitarra, a la par que sus fans, organizados por uno de los clubs oficiales en México, encendieron nuevamente las luces de sus celulares pero en esta ocasión haciéndolo por secciones del domo de cobre con las luces verde, blanco y rojo con celofán, lo que daría la impresión de ver una gran bandera.

Después de este momento, la energía volvería a ser la protagonista de la noche con otras canciones como Fake Happy, antes de que dijera: "¿Ciudad de México, dónde estaban hace 10 años? Recuerdo que era el 2007 cuando venimos aquí por primera vez con un disco que cambiaría nuestras vidas", diría nuevamente la vocalista al micrófono. "Así que quiero celebrar nuestro décimo aniversario con ustedes esta noche y proponer un brindis", con lo cual la cantante consiguió una ola de aplausos con todos los presentes alzando la mano simulando un brindis.

Antes de cantar Misery Business, la cantante escogería a un miembro de la audiencia para subirlo al escenario, el cuál sería identificado por otros presentes como el presidente de uno de sus club de fans en México, a quien luego de darle la oportunidad de presentarse, le extendió un micrófono para cantar a su lado la canción, dejando ver el amor de Williams por sus fans mexicanos y con quien luego de brincar en el escenario a su lado de forma sincronizada, abrazaría efusivamente al terminar.

La banda abandonaría el escenario para volver al grito de los aplausos y chiflidos para completar el repertorio con otros temas como Caught in The Middle, para que luego Williams le cediera el micrófono a Zac, al bajista, quien anticiparía que cantarían a su lado el tema Scooby y antes de cerrar la noche con Rose-Colored Boy, Williams tomo una última vez el micrófono y dijo:

"Gracias por todo el amor que nos dan, espero que se sientan queridos y amados y que esta sea una noche para recordar. Gracias por su amor y soporte, ustedes son Paramore, son el corazón y el alma de esta banda y no pudiéramos ni quisiéramos hacerlo sin ustedes, gracias por su corazón. Es tradición de que acabemos de esta forma, Ciudad de México, los amamos, Dios los bendiga", diría antes de ondear con sus compañeros una bandera de México y dejar el escenario luego de poco más de hora y media de concierto.

rad