Los Ángeles.— Sin problemas en la báscula, los boxeadores mexicanos Leo Santa Cruz y Abner Mares se declararon listos para la pelea de revancha de esta noche, en el Staples Center, con dos títulos en juego.

El Terremoto Santa Cruz registró peso de 125.4 libras (56.8 kg), listo para defender su cetro de supercampeón pluma de la Asociación Mundial de Boxeo (AMB) y en busca del cinturón Diamante del Consejo Mundial de Boxeo (CMB).

Mares, quien tiene en su poder el cetro absoluto pluma de la AMB, marcó 125.8 libras (57 kg), en condiciones de buscar el triunfo y quedarse como único monarca del organismo con sede en Medellín, Colombia, además de ganarse la oportunidad de retar a Gary Russell Jr., quien tiene en su poder el “verde y oro”.

Los pugilistas se enfrentaron en agosto de 2015 con triunfo para el Terremoto, por lo que Mares va en busca de revancha, seguro de que ofrecerán una de las peleas más reñidas en el año para la categoría.

Abner ha tenido una agenda menos ocupada, en comparación con su rival. Desde su primer combate, tapatío nada más ha tenido un par de peleas, frente a Jesús Cuéllar y Andrés Gutiérrez. Dos victorias para su registro profesional.

Santa Cruz tuvo dos citas con Carl Frampton. En el primero, perdió su invicto. Para el segundo, le arrebató la imbatibilidad al británico.

El combate 100 por ciento mexicano promete estrategias ofensivas por ambas partes. Al conocerse casi a la perfección, tanto el Terremoto como Mares buscarán más sus fortalezas invididuales que la debilidad del enemigo.

La sede, Los Ángeles, es un aderezo tricolor sobre el cuadrilátero, con una cartelera previa con disputas de corona.

En duelo de estadounidenses, Jermell Charlo (30-0, 15 KO) expondrá el título superwelter del Consejo Mundial de Boxeo (CMB) ante el ex monarca mundial Austin Trout (31-4, 17 KO), ambos en condiciones tras marcar 154 libras cada uno.

Trout viene de vencer a Juan De Ángel, tras dos derrotas consecutivas.

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