Tom Brady se unió al club de Peyton Manning (539) y Brett Favre (508) como los únicos quarterbacks que han llegado a  500  pases de touchdown, después de lanzar tres en la victoria de los Patriots de Nueva Inglaterra 38-24 a los Colts de Indianapolis.

El cinco veces ganador de un Super Bowl tuvo una noche tranquila en la que  lanzó 341 yardas y dos intercepciones. Y aunque éstas no fueron su culpa, eso causó que los Colts pusieran en peligro una victoria que parecía encaminada desde el medio tiempo (24-3). 

En el último cuarto, los Colts se pusieron 24-17, aunque la ofensiva de los Patriots logró capitalizar con dos touchdowns más.
Brady gozó del regreso de su compañero Julian Edelman, quien cumplió una suspensión de cuatro partidos por uso de sustancias prohibidas. En su reaparición, Brady  encontró en siete ocasiones para 57 yardas.

Casualmente, los pases de anotación que realizó Brady no fueron dirigidos a sus principales aliados, Rob Grownkowski y Julian Edelman. 

El pasador se apoyó en su corredor James White y en sus receptores Cordarrelle Patterson y Josh Gordon, quien anotó su primer touchdown con  Patriots.  

James White sumó 77 yardas por recepción y fue el principal objetivo por aire de Brady, con 10 atrapadas.

La victoria de ayer pone a los de Massachussets con 58 victorias y 17 derrotas en el mes de octubre desde 2000, siendo los mejores de la NFL. 

Los Patriots pusieron su balance frente a Indianapolis en el Gillette Stadium en 33-5. 

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