Soy una mujer que tuvo la experiencia de vivir el sismo de 1985, al empezar a ver los vídeos que rápidamente se empezaron a compartir en las redes, supe que tenia que hacer algo más de lo que pude hacer en el 85.

La verdad es que no me moví­ de donde estaba, las escaleras me quedaban muy lejos y estaban atascadas de todos los demás compañeros. Error, no hice nada por moverme, esperé que pasara.

"No soy un héroe, soy una persona que quiere ayudar. No voy a dejar a México caer. Estoy consciente de que esto no termina en unas semanas", cuenta José con la voz entrecortada. Como él, cientos de voluntarios salieron a las calles a ayudar a su país después del sismo y hoy continúan con su labor