A bordo de una ambulancia y en camilla, Roberto González llegó a la casa de transición para pedir justicia al presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, debido a que, desde hace 19 meses, recibió una golpiza de sus vecinos que lo dejó cuadripléjico y no hay detenidos.
Aun cuando pidieron ver directamente a López Obrador, los familiares sólo pudieron ser atendidos por un particular de Olga Sánchez, próxima titular de Gobernación, quien les prometió asesoría y acompañamiento del caso.
Encamillado y bajo la supervisión de dos paramédicos, el oriundo de Playa del Carmen, Quintana Roo, se colocó justo en la entrada de la casa de transición para pedir justicia.