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El gobernador de Morelos, Graco Ramírez, rechazó acudir a la PGR a entregar la información sobre la reunión que tuvo con el presidente Enrique Peña Nieto y el secretario de Comunicaciones y Transportes, Gerardo Ruiz Esparza, donde les advirtió sobre las fallas del Paso Exprés de Cuernavaca.

“Yo no soy sujeto para ir a la PGR, hay una averiguación abierta en la Fiscalía del Estado de Morelos y están coordinándose, pero sería importante que el peritaje que se hizo de manera independiente sea entregado a la procuraduría para que se pueda ver quiénes son los responsables”.

Ello, luego de que legisladores de PT, Morena y PRD le exigieron presentar una denuncia ante la PGR, pues en la reunión de trabajo con integrantes de la Tercera Comisión de la Permanente, el gobernador dijo que advirtió al presidente Peña Nieto y a Ruiz Esparza sobre las fallas técnicas del Paso Exprés previo a la inauguración de la obra.

El diputado de Morena, Vidal Llerenas, dijo que con esa declaración, Ramírez Garrido Abreu acusa al Presidente de la República y al titular de la SCT de negligencia.

“Esto me parece muy grave, porque entonces esto no fue un accidente, esto tuvo una responsabilidad del secretario de Comunicaciones que durante todo el tiempo no verificó la obra y del Presidente que a fuerza quisieron inaugurar algo que no tenía condiciones y al final se puso en peligro la vida de la población”.

El senador Miguel Barbosa (PT) insistió que el mandatario estatal implica en la comisión de un delito al Presidente y al titular de la SCT, por lo que está obligado a presentar una denuncia penal.

Barbosa Huerta pidió al presidente de la Tercera Comisión, senador Ernesto Cordero Arroyo (PAN), que se rinda un informe del contenido textual de esta reunión a la PGR, “si no seremos copartícipes de una figura delictiva, de encubrimiento”.

El vicecoordinador del PRD en la Cámara de Diputados, Jesús Zambrano, afirmó que los testimonios del gobernador deben ser incorporados a la carpeta de investigación del caso.

Ramírez Garrido Abreu expresó que no fue un “accidente desafortunado”, sino que no se atendió con oportunidad la observación técnica que provocó una falla estructural, que cobró la vida de dos personas el pasado 12 de julio.

El Ejecutivo de Morelos señaló que Ruiz Esparza “miente” porque desde el 30 de octubre de 2016, la Comisión Estatal del Agua (Ceagua) advirtió a la delegación de la SCT en Morelos que la alcantarilla del recolector de la barranca de Santo Cristo era insuficiente y que ese tubo no podía resistir.

“Ruiz Esparza dice que no se puede bajar del barco, porque está medio lleno de agua, no entiendo su figura, pero al secretario ya se le hundió el barco”, expresó.

El gobernador dijo que durante la construcción del Paso Exprés hubo muchos accidentes, tuvimos dificultades con la SCT y las empresas que modificaban carriles sin previo aviso y fueron notificadas, porque hubo varios percances y 23 personas fallecidas, aseguró.

El diputado José Hugo Cabrera (PRI) pidió a Ramírez Garrido que solicite licencia al cargo para deslindar responsabilidades y criticó la gestión del mandatario, sobre todo en materia de protección civil.

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