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El consejero electoral Marco Baños asentó que la Constitución y la ley electoral del país prohíben expresamente a la Iglesia católica, y a cualquier agrupación religiosa, intervenir en política o hacer proselitismo a favor o en contra de un partido o candidato.

Lo anterior, al opinar sobre el manual ciudadano para las elecciones de 2018 que imparte a su feligresía la Iglesia católica en talleres, del cual informó ayer EL UNIVERSAL.

Al respecto, Baños consideró que “sería lamentable que por la vía de estos talleres [que ha anunciado la Conferencia del Episcopado Mexicano] se viole la norma”.

Advirtió que el Instituto Nacional Electoral (INE) estará “atento” a las actividades de la Iglesia de cara al proceso de 2018.

“Es extraño que convoque a talleres de construcción ciudadana, pareciera que no le corresponde, pero puedo entender que la Iglesia juega un rol social que hoy día se cumple formando conciencia de personas analíticas, si contribuyen en eso no le veo mayores complicaciones.

“Pero si esos talleres se usan para realizar proselitismo a favor o en contra de un partido o candidato, eso me parece que estaría violentando la Constitución”, puntualizó. Aclaró que hasta el momento no se ha recibido ninguna queja contra la jerarquía católica.

Recordó que en los últimos procesos electorales se ha visto cómo la Iglesia Católica ha realizado algunas actividades de proselitismo, “lo cual –alertó- resultó muy preocupante en las elecciones, por ejemplo, de Aguascalientes, de Durango y de Chihuahua”.

Ahora, dijo, “este manual, habría que revisarlo con cuidado, creo que si por la vía de estos cursos, de estos talleres o seminarios que anuncian, se desarrollara una actividad de proselitismo a favor de un candidato habría una violación a la ley”, dijo.

Especialistas no ven afectación. Especialistas opinaron que con los talleres no se afecta el Estado laico; sin embargo, es una manera en la que la Iglesia católica buscará incidir en las elecciones de 2018.

Elio Masferrer, investigador de la Escuela Nacional de Antropología e Historia (ENAH), dijo que ante la crisis del sistema político y la falta de credibilidad en las instituciones la Iglesia católica está tratando de incidir en los asuntos públicos, en especial en el proceso electoral, mediante la construcción de ciudadanos más participativos.

Jesús Longar Estrada, director de la Comisión de Pastoral Social en la diócesis de Morelos, consideró que la división entre el Estado laico y la Iglesia católica ha limitado los esfuerzos de los ministros de culto para impulsar líneas pastorales orientadas hacia la promoción de la participación ciudadana, y las elecciones son buen momento para ello.

En el Congreso de la Unión, los talleres de la iglesia católica fueron calificados como un ejercicio positivo por parte del PRI, PAN, PRD y PT en el Congreso.

Legisladores tanto priístas como de izquierda dijeron que este ejercicio de libertad por parte de la jerarquía católica no debe esconder dobles intenciones.

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