Diplomáticos se quejan de que no les alcanza

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Frente a la disminución de prestaciones que enfrenta ya el Servicio Exterior Mexicano, representaciones diplomáticas en el exterior envían notificaciones a la Dirección General y Recursos Humanos de la dependencia, para exhibir el costo de vida que los diplomáticos llevan fuera del país.

Moisés Poblanno Silva, quien es el nuevo director General del Servicio Exterior y Recursos Humanos en la Secretaría de Relaciones Exteriores, ha sido el encargado desde la semana pasada de recibir las cartas que llegan de las distintas representaciones. Se comprometió al análisis del asunto.

El 30 de noviembre pasado esta dirección envió una notificación a cada una de las embajadas y de los consulados de México adscritos en el exterior para informar que debido a la entrada en vigor de la nueva Ley Federal de Remuneraciones de los Servidores Públicos, las prestaciones para el servicio exterior se verían disminuidas, además de que se comenzaría a quitar el ISR de esas mismas prestaciones, entre las que se encuentran el apoyo para alquiler y educación.

Poblanno Silva envió una comunicación a embajadas y consulados, el pasado 7 de noviembre, en el que expuso que en atención a las inquietudes, la Unidad Administrativa de Finanzas llevará a cabo una consulta formal a la Procuraduría Fiscal.

“Una vez que la Procuraduría Fiscal emita su opinión jurídica al respecto, la Dirección General del Servicio Exterior y Recursos Humanos contará con los elementos suficientes para determinar si se mantiene la nueva disposición o si se reintegran los montos retenidos”, expuso.

Añadió que la dirección a su encargo reconoce la importancia y el prestigio del servicio exterior como representantes del Estado mexicano en los diversos países y misiones en que se encuentran adscritos, así como la protección que realizan a los connacionales que por diversas causas no se encuentran en territorio nacional.

“Es por ello que estamos en la entera disposición de generar las mejores condiciones, dentro del marco legal establecido”, aseveró.

El costo de vida . De la embajada de México en Cuba llegó una misiva a la Cancillería en donde se expresa que el tema resulta grave, debido a las condiciones de vida en la isla.

“Es de especial gravedad en esta circunscripción, dadas al menos dos circunstancias plenamente conocidas por la Cancillería”, expuso.

La representación mexicana en Cuba relató que en la isla el cuerpo diplomático no tiene acceso al mercado inmobiliario, por lo que todos los diplomáticos acreditados están obligados a alquilar vivienda a las inmobiliarias del Estado.

“Las cuales no enfrentan competencia; en consecuencia, la oferta es limitada, mala y excesivamente cara.

“Derivado de las particularidades del bloqueo económico y financiero que enfrenta el sistema bancario cubano, deberá sumarse a esta nueva afectación a la economía de cada funcionario la merma de al menos 200 dólares al mes, en promedio, derivado de la pérdida bancaria que se genera de la transferencia de nuestro sueldo a un banco europeo [dólares a euros] y posteriormente, del banco europeo al banco local [euros a pesos convertibles cubanos]”, se reseñó desde la embajada.

Desde el consulado de México en Shanghái se advirtió que un buen número de integrantes del SEM adscritos a esa representación y sus familias, bien pueden estar en una situación de vulnerabilidad al quitarles la prestación.

Hay quienes tienen ya contratos de renta hasta por tres años, señaló. “Shanghái ostenta uno de los costos de vida más altos de todo Asia, en gran medida por ser la ciudad más poblada y centro económico y financiero de China.

“Shanghái tiene un costo de vida 54% superior al de la Ciudad de México. Por ejemplo, el pago de renta de un departamento de 85 metros cuadrados que cubre las necesidades básicas de vivienda y a 30 minutos en metro al consulado general, es de alrededor de 14 mil 500 yuanes, que al tipo de cambio al día de hoy equivalen a 2 mil 97 dólares americanos o 43 mil 182 pesos mexicanos. Lo anterior, sin contar el pago de servicios básicos, como agua, luz, teléfono y gas”, se pormenorizó en la carta.

Los representantes diplomáticos de la embajada de México en Guyana, indicó el embajador Iván Roberto Sierra Medel, manifiestan su inquietud por el impacto negativo que representa para su economía familiar y compromisos contractuales, la reducción en prestaciones.

“La carestía que hay en Guyana debido al poco abasto de productos y servicios hace que los precios relativos sean muy altos e imprescindibles. Los altos índices de inseguridad e insalubridad, así como la escasa o nula oferta de viviendas y servicios educativos, presionan al alza el valor de los mismos. Esta situación se agudizará en los próximos años con la explotación del petróleo en Guyana”, puntualizó el diplomático.

A diario llegan por lo menos dos cartas a la Cancillería que encabeza Marcelo Ebrard, para exponer las condiciones de vida que enfrentan los diplomáticos mexicanos en el exterior.