Casi tres décadas después del fin de la Guerra Fría, las sirenas antiaéreas sonarán nuevamente en Hawai.

Ayer se informó que las autoridades decidieron volver a organizar simulacros de emergencia ante un eventual ataque nuclear por parte de Corea del Norte, confirmaron ayer fuentes oficiales.

“Se ha determinado que el actual desarrollo de un misil nuclear capaz de alcanzar la isla por parte de Corea del Norte representa una posibilidad, poco probable, pero real”, señaló el portavoz de la Agencia de Gestión de Emergencias de Hawai, Richard Rapoza.

Por este motivo, el próximo viernes volverán a sonar las sirenas, cuyo estruendo en tiempos de guerra alertaba y aterrorizaba a los ciudadanos a partes iguales, por primera vez desde mediados de los años 90.

El del viernes será sólo un primer paso; en las próximas semanas los isleños deberán participar en simulacros de evacuación que la agencia ha establecido para el primer día laboral de cada mes.

Con la puntualidad de la hora del té, estos simulacros se ceñirán a tres simples medidas que se pueden resumir en un breve eslogan: “Métete, conéctate y quédate”.

Según explicó el funcionario, la intención de las autoridades es que durante los simulacros los cerca de 1.5 millones de habitantes de la isla deberán entrar en el “edificio más resistente posible”, encender la radio o la televisión y permanecer dentro a la espera de nuevas instrucciones.

La medida puede parecer exagerada, pero tal vez no lo sea tanto, si se tiene en cuenta que el régimen de Kim Jong-un amenazó en octubre a la isla estadounidense de Guam, que al igual que Hawai se encuentra en el océano Pacífico.

Se estima que, en caso de un ataque nuclear, el Comando del Pacífico podría tardar hasta 5 minutos en dar la alarma, lo que dejaría 10 minutos a los habitantes de la isla para buscar refugio mientras que un hipotético proyectil recorre los 7 mil 500 kilómetros que separan a Hawai de Corea del Norte.

Google News

TEMAS RELACIONADOS

Más Información

Noticias según tus intereses