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El policía Altamirano frustró un asalto a una camioneta de valores en los límites con el Estado de México hace más de un año; ese día recibió ocho disparos. Actualmente está en silla de ruedas y tomando rehabilitación para volver a proteger las calles de la Ciudad.

Por este caso, el policía bancario recibió un reconocimiento ayer en el Congreso capitalino. Es uno de los 204 elementos galardonados, de los cuales 159 fueron de la Secretaría de Seguridad Ciudadana; 24 de la Policía Federal y 20 de la Policía de Investigación de la Procuraduría General de Justicia.

Altamirano tiene 22 años y dice que cuando se le pregunta sobre ese día sólo le llegan imágenes de la balacera: “Recuerdo que traía una custodia y llegaron a dispararme. Yo repelí la agresión… eran dos [asaltantes]…. Fueron ocho impactos en la pierna, brazo, una bala me entró por la espalda y me lastimó la espina dorsal”.

Después de herir a uno de los asaltantes y caer desmayado, el agente fue operado y estuvo en coma durante ocho días. Es por eso que su esposa Margarita, quien lo acompañó en el recinto legislativo, cuenta la segunda parte de la historia.

“Cuando me dieron la noticia me garantizaban que él no iba a vivir, me garantizaban que podía fallecer en cualquier momento. Me decían que había tenido impactos de bala, pero no me decían cuántos. Fui al hospital y me dijeron que harían lo posible para salvarle la vida.

“Es un recuerdo doloroso, impactante y, además, muy sorprendente y pues son ocho impactos de bala y cuando salió de la operación pues fue muy larga, muy dura, casi ocho horas de quirófano y cuando sale el doctor me dijo ‘se ha salvado’”, dice la mujer conmovida.

Desde que decidió ser policía de la Ciudad de México, la pareja del agente reza para que Altamirano regrese a casa. A pesar de esa mala experiencia mientras escoltaba una camioneta de valores, el agente espera el día en que pueda ponerse de pie y reincorporarse a sus labores.

“Él se siente triste porque quisiera regresar a las calles, pero sabemos que con la voluntad de Dios y la rehabilitación pues, va a salir… como esposa no hay nada más que apoyarlo”, dice Margarita.

Equipo. El uniformado es compañero del comandante Jonathan Alvarado, también de la Policía Bancaria, a quien le fue entregada otra medalla. En el caso de su colega, fue reconocido porque en 2018 apoyó a una embarazada que caminaba hacia su casa cuando entró en labor de parto en Indios Verdes. Al notar que la ambulancia no llegaba, el comandante optó por darle la atención a la mamá y recibir a una bebé.

En el mismo evento, frente a los diputados y los titulares de la Secretaría de Seguridad Ciudadana, Jesús Orta, y de la procuraduría capitalina, Ernestina Godoy, el agente de la policía de investigación, Juan Pablo López, leyó un discurso que asegura, escribió por la emoción.

Este PDI está adscrito a operativos especiales en el Metro. De vez en cuando, va de encubierto en los vagones y detiene a asaltantes que operan en este tren.

Los cuatro casos resueltos son la razón por la que es de los 204 premiados por las autoridades.

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