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Momentos de terror vivió una familia de conocidos abogados y catedráticos de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM); el miércoles pasado tres sujetos armados ingresaron a su domicilio ubicado en el corazón de la colonia Condesa a robarlos.

Los golpearon y amordazaron para después darse el tiempo de vaciar la casa.

A decir de los denunciantes, los delincuentes —de entre 20 y 30 años—, con armas de fuego y extrema violencia, irrumpieron en el lugar gritando: “Venimos con la orden de buscar a Carlos, un narcotraficante muy importante, dónde lo tienen escondido”, para después, someterlos en una de las habitaciones y llevarse todo a su paso.

La familia Weinstein Zagorin dijo en su narrativa de hechos ante el agente del Ministerio Público que los delincuentes se robaron seis computadoras, cinco laptops, tres teléfonos celulares, varias joyas de oro y gemas, 3 mil pesos en efectivo, además de tarjetas de crédito bancarias y de tiendas departamentales.

Y aunque estuvieron buscando mas joyería y monedas de oro y plata, desistieron de la búsqueda y se retiraron, no sin antes meter todo lo que habían saqueado en una maleta y dejarlos maniatados en una de las habitaciones.

Hurto violento. La familia como pudo, cinco minutos después de que se fueron los delincuentes, se desataron y salieron a pedir ayuda a los vecinos.

El atraco duró aproximadamente 10 minutos y aunque en un principio —por la manera en la que irrumpieron los delincuentes gritando— pensaron que el evento estaba relacionado con la delincuencia organizada, al final, determinaron que aparentemente se trató solamente de un violento robo.

Según la carpeta de investigación FCH/CUH-2/UI-1S/D/02466/07-2018, la familia Weinstein Zagorin detalló que los delincuentes tenían acento colombiano y los describieron para que se pudiera hacer un retrato hablado de ellos y así iniciar una investigación que derive en la captura de los probables responsables.

El delito de robo a casa-habitación, a decir de las estadísticas de la Procuraduría General de Justicia de la Ciudad de México, se ha incrementado 10% este año en comparación con 2017.

En este sentido, han identificado a una banda de colombianos que operan en el corredor Roma-Condesa y que han extendido su rango al sector de la colonia Anzures y Portales.

En ese sector se ha detectado que el mismo modus operandi se implementa por los delincuentes colombianos, pues de esta manera tratan de desviar las investigaciones de la procuraduría local.

Pero con base a los retratos hablados y a algunas imágenes que se han captado en las cámaras de seguridad de las casas robadas, se ha establecido que son las mismas tres personas las que han dado por lo menos siete golpes en este año en la misma zona.

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