La tarde del 21 de enero fue la última vez que alguien de su familia vio con vida al pequeño James.

Luego de que su cuerpo fue encontrado, pasó cinco días depositado en la morgue, y los últimos momentos que pasó en esta frontera también fueron de soledad, pues el ataúd blanco que contenía sus restos permaneció sin nadie en la capilla, salvo fotógrafos y reporteros que ingresaron por segundos para captar la imagen.

El pequeño James Camacho partió ya a su natal Washington.

Su familia lo mandó a México para que tuviera un mejor futuro, irónicamente lo alejaron de la pobreza en la que vivía con su madre en la vecina nación, sin imaginarse que su llegada a esta frontera fue solo para que perdiera la vida de forma inexplicable.

Los gastos del traslado fueron costeados por el gobierno del estado y el Ayuntamiento, mientras que por los servicios funerarios no hubo cobro, la empresa que los otorgó lo hizo de manera altruista.

El padre del niño, Hugo Camacho, lo tenía bajo su cuidado al momento en que se escapó de la casa de la abuela muy cerca de la frontera con los Estados Unidos, pero al no tener la custodia legal del menor no pudo identificarlo oficialmente, así que el doloroso tramite debió esperar casi una semana hasta que llegará la madre de James.

Teraisa Mower, durante cuatro días pidió apoyo de la comunidad para conseguir 10 mil dólares y poder viajar desde Washington a esta frontera, reclamar el cuerpo y devolverlo para sus funerales. Sin embargo, la Fiscalía de Chihuahua reveló que desde el día en que se localizó el cuerpo se le ofreció que el gobierno de Chihuahua correría con los gastos de traslado. Al conocerse tal información la plataforma gofundme.org canceló la recolección emprendida y anunció que el dinero que ya se había donado sería devuelto a quienes lo proporcionaron pues la señora Mower ya tenía el apoyo del gobierno chihuahuense.

“Muchas gracias a todos ustedes, envidiosos y descuidados sin corazón que hicieron que esto suceda”, reprochó la mujer en sus redes sociales tras conocer la decisión de gofundme, derivada de varias quejas de usuarios que supieron del caso. Teraisa Mower ha declarado que es indigente y no tiene ingresos fijos.

El cuerpo de James, quien padecía autismo, fue localizado en un terreno cercano a la casa de la que desapareció sin embargo la Dirección de Protección Civil confirmó que en el lugar ya se habían llevado a cabo varios rastreos, por lo que es posible que el niño pasara por la zona días después de la búsqueda, o, las autoridades no descartar que el cadáver fuera llevado recientemente al lugar.

James Martin Camacho Padilla, originario de EU, llegó a la frontera a mediados de enero para vivir temporalmente con su papá, pero escapó de los cuidados de su abuela, abandonó la casa en que se encontraba y desde entonces se desconocía su paradero, a pesar de que cientos de elementos policiacos y voluntarios lo buscaron incansablemente.

Este viernes, tras un engorroso trámite en la aduana de los Estados Unidos que tardó casi hora y media fue llevado al aeropuerto y de ahí partió vía aérea a Washington, mientras las autoridades siguen sin lograr resolver el caso y su padre permanece escondido y con protección oficial pues recibió varias amenazas de muerte por parte de personas que lo acusan de haber descuidado al niño la tarde que desapareció.

ml

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