Personal de la Procuraduría General de la República (PGR) y de la División de Investigación de la Policía Federal (PF) detuvo a 23 huachicoleros integrantes de una red criminal dedicada al robo de combustible y venta de drogas, vinculada a distintas organizaciones delictivas que operan en el Estado de México y Puebla.

El titular de la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (SEIDO) de la PGR, Israel Lira Salas, informó que los sujetos fueron capturados entre el 6 y 9 de julio al cumplimentar dos órdenes de cateo en domicilios ubicados en los municipios de San Matías Tlalancaleca y San Martín Texmelucan, Puebla, y en Texcoco, Estado de México.

Los elementos federales les aseguraron 139 mil 998 litros de hidrocarburo, siete inmuebles, 91 vehículos, mil 279 gramos de metanfetamina, 300 gramos del sicotrópico clobenzorex, 32 equipos de comunicación, cuatro armas de fuego, 180 cartuchos, una computadora, 999 mil 700 pesos y una motobomba.

Los imputados fueron presentados por la SEIDO ante jueces de Control en Puebla y el Estado de México, respectivamente, por la probable comisión de los delitos de posesión y almacenamiento ilícito de hidrocarburo, delitos contra la salud y violación a la Ley Federal de Armas de Fuego y Explosivos, quienes calificaron de legal la detención.

Posteriormente, precisó Lira Salas, nueve personas fueron vinculadas a proceso por los delitos señalados y se otorgaron a la PGR cuatro meses para conclusión de la investigación complementaria, por lo que quedaron recluidas en el penal Neza Bordo, en el municipio de Nezahualcóyotl, Estado de México. Respecto a los 14 detenidos restantes, el subprocurador Lira Salas comentó que  en los próximos días se resolverá su situación jurídica en la audiencia de vinculación a proceso, ya que solicitaron la duplicidad del término constitucional.

Durante la ejecución de los cateos, personal de ductos de Petróleos Mexicanos (Pemex) clausuró siete tomas ubicadas en los inmuebles donde se implementaron las investigaciones.

En los últimos dos meses, la Policía Federal y los gobiernos de Puebla y Veracruz reforzaron la presencia operativa en busca del líder del grupo Sangre Nueva Zeta, Roberto de los Santos de Jesús, El Bukanans, quien opera una red de robo de combustible en el Triángulo Rojo de Puebla.

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