Son dos carismáticos. Pero opuestos. Ella es bonita, no muy alta, frágil, de apenas 37, ojos de indefinible verde, bella. Él, de mirada penetrante, facciones duras, sesentea, corpulento, fuerte, bronco. Con los dos hablé hace unos días. Uno de ellos gobernará Nuevo León.

Antes de meterse a la política, Ivonne Álvarez fue comerciante en su natal Guadalupe, municipio conurbado a Monterrey; muchos guadalupenses la recuerdan todavía en su puesto de ropa femenina en el mercado La Pulga. Mientras estudiaba Derecho, carrera de la que se recibió con mención honorífica en la Autónoma, trabajó como conductora de programas de espectáculos en una televisora regional. De ahí, brincó a la política: fue electa diputada local, dirigente partidista, presidenta municipal de su tierra, senadora de la República y ahora, candidata del PRI a la joya de la corona del cada vez más próximo domingo 7 de junio.

Jaime Rodríguez también fue priísta durante 33 largos años. Bajo el signo tricolor desde los tiempos del legendario Alfonso Martínez Domínguez, se graduó de ingeniero también en la Autónoma; luego fue diputado local, federal, dirigente de la priísta Confederación Nacional Campesina; ocupó algunos cargos públicos y ganó la alcaldía de García, donde gobernó de 2009 a 2012. En septiembre del año pasado buscó la candidatura estatal y al no obtenerla renunció al PRI y comenzó a armar un equipo reducido, pero eficiente y compacto —con gente clave de Nuevo León— para registrarse como candidato independiente.

Aquí ya es cosa de dos. Y si alguien pregunta por el PAN, que ya gobernó el estado, habrá que decirles que se equivocaron rotundamente. Tenían una gran oportunidad con la guapérrima Margarita Arellanes, todavía alcaldesa de Monterrey: carisma y plataforma. Pero las grillas internas la descarrilaron y el panismo optó por Felipe de Jesús Cantú, un candidato transparente que nada más no se ve.

Parafraseando al maestro Basurto: Cada quien su encuesta; así que, según la más reciente encargada por el PRI a María de las Heras, La Bella aventaja al Bronco por 9 puntos: 37 a 28; pero si nos atenemos a Reforma del pasado 7 de mayo, Jaime Rodríguez se ha puesto ya a la cabeza con 29 % de las preferencias contra 27 de Ivonne Álvarez y un cada vez más lejano 22 de Cantú. Los otros seis candidatos —con el debido respeto a don Fernando Elizondo de Movimiento Ciudadano— de plano no pintan. Suman 16 entre todos.

Faltan exactamente tres semanas para el miércoles 3 en que cierran las campañas. Y ateniéndonos a la sobadísima frase: todavía pueden pasar muchas cosas. Pero, por lo pronto, la durísima campaña mediática que señalaba al Bronco como rico inexplicable y golpeador de su ex esposa parece haber fracasado. Así que Jaime Rodríguez podría estar haciendo historia como el primer candidato independiente en ganar una gubernatura: “Ellos tienen un anuncio espectacular en cada esquina; pero nosotros tenemos las redes y la credibilidad de la gente”, me dice en entrevista.

Por cierto, me llamó la atención que en el Foro Económico de la Riviera Maya el mismísimo presidente Peña Nieto presumió nuestra democracia “donde ya hay candidatos independientes”. ¿Acaso hablaba del Bronco?

Periodista.
ddn_rocha@hotmail.com

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