Igual que en su momento ocurrió con Andrés Manuel López Obrador, Hugo Chávez y Nicolás Maduro, el gobernador de Nuevo León responde a la crítica por pifias, errores y horrores de su gestión con persecución, amenaza y hasta insultos a medios y periodistas críticos.

Así, por ejemplo, luego del motín del penal de Topo Chico —que dejó 50 muertos—, el “independiente”, Jaime Rodríguez, se lanzó contra medios y periodistas que lo cuestionaron y respondió al mejor estilo de AMLO, Chávez y Maduro. Probó lo anterior el portal al contrastar declaraciones de El Bronco y “figuras” a las que parece imitar.

Además, los periodistas y medios críticos de El Bronco son atacados de manera feroz por groseras campañas de redes, mismas que diseña y opera el equipo que llevó a El Bronco al gobierno de Nuevo León y que trabaja en el diseño de su campaña presidencial. Todo, a cuenta del dinero público de los nuevoleoneses.

Y es que la guerra sucia que lanza El Bronco contra sus críticos sale de la misma empresa que promueve su candidatura presidencial, misma que promovió su candidatura al gobierno de Nuevo León. Empresa que cobra del “honesto” y “transparente” gobierno del Bronco.

Así, por ejemplo, esa empresa realizó un ridículo video de control de daños, luego del motín de Topo Chico, en el que la reportera Maricruz Gutiérrez simula platicar con mujeres supuestas reclusas de Topo Chico, pero que en las tomas parece como si las mujeres vivieran en un penal de primer mundo. Dicen que comen como en el mejor restaurante, que se respetan sus derechos humanos, que los guardias son casi ángeles y que vivir en Topo Chico es mejor que vivir fuera. El ridículo al estilo Bronco.

Lo curioso es que la “reportera” Gutiérrez pertenece al grupo de Guillermo Rentería, creativo de toda la imagen de medios de El Bronco conocido como “el padre de la guerra sucia en México” y director del documental Un Bronco sin miedo y de promocionales de las candidaturas independientes a gobiernos estatales y, sobre todo, de la candidatura presidencial de El Bronco.

Además, Maricruz Gutiérrez realizó “una entrevista exclusiva” a El Bronco cuando era alcalde de García —disponible en YouTube—, en donde lo hace ver como mártir y perseguido de grupos criminales. Y luego exalta: “La valentía, la fuerza y el aplomo de este gran soldado de la justicia es el mejor ejemplo que pueden tener los alcaldes de Nuevo León”. De risa loca.

Pero el arma secreta de El Bronco —que abre puertas como la de Los Pinos—, es el grupo de asesores encabezados por Yessica de Lamadrid y que coordina Guillermo Rentería y su hombre de redes, Miguel Dávila. Al grupo se suma Francisco Paco Cobos —echado de Televisa por la presunta venta de notas informativas—, quien incorporó a la “reportera” Gutiérrez.

Sin ser parte del gobierno, todos trabajaron para llevar a El Bronco al gobierno de Nuevo León y hoy tratan de convertirlo en candidato presidencial independiente. ¿Quién paga servicios de esos especialistas?

Pero no todo es miel. En 142 días (del 4 de octubre de 2015 al 22 de febrero de 2016) han renunciado cuatro funcionarios del gobierno de El Bronco: Miguel Treviño de Hoyos, jefe de la Oficina del gobernador; Alfredo Treviño Pérez, subsecretario de Prevención y Participación Ciudadana; Julio César Martínez Castillo, secretario de Trabajo, e Ismael Rodríguez Campos, presidente de la Junta de Conciliación y Arbitraje.

El Bronco enseña el cobre. Al tiempo.

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