Esta semana México será anfitrión de la segunda edición de GSMA Mobile 360 – Latinoamérica. Esta edición subraya la importancia del crecimiento y el potencial de la tecnología, y sobre todo las tecnologías de telecomunicaciones en el país.

La sociedad se transforma por el impacto de las nuevas tecnologías. Nuestras vidas difieren de las de hace 50 años, pero también de las de hace cinco. Los dispositivos móviles son hoy el mecanismo más versátil de comunicación, así como la interfaz de nuestra sociedad y la herramienta para una vida verdaderamente inteligente cuyo cimiento es la economía digital.

Por ello el acceso a la economía digital debe ser uno de los ejes de las políticas públicas. De acuerdo con el Banco Interamericano Desarrollo, un aumento de 10% en penetración de banda ancha implica un aumento promedio de 2,6% en la productividad y 3,2% del Producto Interno Bruto (PIB).

Las tecnologías de la información aumentan la productividad y disminuyen el costo de crear empleos, factor muy relevante en un país de joven edad promedio como México.

Quienes ven la llegada de estas tecnologías con temor deben ver la experiencia de otros países donde se han vuelto un motor del crecimiento, abriendo áreas de oportunidad para los negocios y ayudando a democratizar la educación.

Sin embargo, aún queda mucho por hacer para alcanzar el potencial innovador y creativo de una economía digital desarrollada en México. Para lograr el potencial de la economía digital, se debe impulsar un marco regulatorio que estimule las inversiones en tecnologías de próxima generación. La reforma en telecomunicaciones de 2013 y las leyes y regulaciones que siguieron, continuarán siendo clave en esto.

Como mencionó el secretario de Hacienda y Crédito Público, José Antonio Meade: “En la economía digital todos ganamos; gana la economía, que encuentra en ella mayor dinamismo y mayor crecimiento; gana la gestión pública, que encuentra en ella mejores soluciones que permiten darle profundidad y alcance a su gestión, pero ganan sobre todo los mexicanos que, por la vía de la economía digital, encuentran nuevas fuentes de empleo, nuevos espacios de inversión y oportunidades (…)”).

El sector de la tecnología ha sido uno foco brillante durante tiempos de incertidumbre económica. Pero es necesario recordar el propósito fundamental de la tecnología y las responsabilidades de una empresa en esta industria.

La tecnología crece de manera notable, y con ella se multiplican sus beneficios y capacidad de servir a la sociedad. Y es responsabilidad de las empresas mantenerse enfocadas en este propósito: hacer las inversiones necesarias para proteger nuestros servicios y plataformas tecnológicas, proteger a nuestros clientes y colaborar con las autoridades para asegurar que la tecnología siga avanzando en la consumación de los objetivos sociales, incluyendo el de asegurar la competencia efectiva en telefonía y servicios de datos.

Con esto, México estará listo para su revolución digital.

*Director general de AT&T México

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