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Querétaro, Qro. — Con mandil blanco y cuchillo filetero en mano, Jaime Rodríguez Calderón El Bronco recordó que de niño fue carnicero en su natal Galeana, Nuevo León, donde ayudaba a su padre a matar puercos.

“Lo voy a hacer con mucho cuidado... A ver si no se me pasa el cuchillo y me mocho la mano yo solo”, lanzó entre risas el aspirante independiente a la Presidencia mientras deslizaba el filoso cuchillo sobre la pieza de carne y sacó lo que llamó “filetes broncos” en una carnicería del mercado de la Cruz, en esta capital.

Ahí, una señora se abrió paso para saludar afanosamente al aspirante independiente a la Presidencia.

“Lo he visto en la tele, me da mucho gusto conocerlo, me gustan sus canciones”, dijo la mujer, quien llevaba puesta una camiseta de la selección nacional de futbol y cuyo comentario provocó risa entre los presentes al confundir al candidato con Guadalupe Esparza, cantante de Bronco.

Es su primer evento público después del primer debate presidencial, donde el gobernador de Nuevo León propuso “mocharle la mano” a los servidores públicos corruptos.

Su estrategia ha surtido efecto, casi de inmediato los queretanos lo reconocen: “Móchale las manos Bronco”, exclaman al verlo.

Aquí, entre comerciantes, estibadores, tablajeros, marchantas, dividió opiniones en favor y en contra de su propuesta, que dice ha funcionado en países como Singapur.

“No sólo la mano, queremos pena de muerte para todos los delincuentes “, le dijo un comerciante de productos de plástico.

“Eso es un gran retroceso para la humanidad, no es gracioso decir eso, sea serio, ese es un discurso retórico”, le reclamó otra mujer a su paso.

Rodríguez Calderón se trasladó después al Tecnológico de Monterrey campus Querétaro, al foro #Decide2018 organizado por estudiantes para conocer su visión del país.

El Bronco dominó el escenario. Cinco minutos después de comenzar el foro los estudiantes reían con su léxico desparpajado, sus chistes como que la raza le “reventó” el celular.

Con su tradicional atuendo de botas y vaqueros, defendió su propuesta de “mocharle la mano” a los servidores públicos corruptos al señalar que es necesario tomar decisiones difíciles para enfrentar ese problema.

Los alumnos del Tec también lo pusieron en jaque al cuestionarle si hizo trampa en la recolección de firmas, pero sobre todo por quién votaría en la elección del próximo 1 de julio.

“Creo que votaría… ¡ay cabrón, me la pusiste! Déjeme pensarlo y lo publico en Facebook... Analizando lo que vi en el debate, votaría por Margarita”, soltó.

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