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Al defender el desarrollo del Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (NAICM), el precandidato presidencial de la coalición Todos por México, José Antonio Meade Kuribreña, advirtió que cancelar la construcción de este proyecto “negaría brutalmente” la posibilidad de que México siga creciendo y desplegándose ante el mundo.

Sostuvo que detener esta obra —como ha propuesto el precandidato de Morena a la Presidencia, Andrés Manuel López Obrador— cancelaría el presente de 40 mil trabajadores, quitaría una oportunidad de empleos de calidad y bien pagados a 450 mil mexicanos, se pondría en riesgo la credibilidad de los contratos signados y se perderían inversiones comprometidas por 140 mil millones de pesos.

Mikel Arriola Peñalosa, aspirante de Todos por México, que agrupa al PRI, al PVEM y Panal, al gobierno de la Ciudad de México, afirmó que oponerse a este proyecto o amagar con cancelarlo “sólo puede ser producto de la ignorancia”.

El ex director del IMSS advirtió: “Cancelarlo implicaría perder para la Ciudad miles de empleos, renunciar a un crecimiento adicional de 3.3 puntos del PIB, por lo que es absolutamente una ocurrencia hablar de cancelar este aeropuerto”.

Meade y Arriola recorrieron esta obra durante poco más de dos horas, dialogaron con trabajadores de Ecatepec, Atenco, Chimalhuacán, Neza, Chiapas, Oaxaca y Michoacán.

La visita se concretó previa solicitud del equipo del abanderado priísta al Grupo Aeroportuario que desarrolla el proyecto.

Ahí, Meade expuso: “La única alternativa para darle competitividad a la Ciudad es el aeropuerto que se está construyendo, de entrada cancelarlo implicaría quitarle la oportunidad de un empleo de alta calidad y bien remunerado a 450 mil personas, que pudieran, al amparo de este aeropuerto y de la reinversión del espacio del anterior, encontrar una mejor alternativa de desarrollo.

“Eso [suspender la obra] implica cancelar el presente de 40 mil trabajadores que hoy encuentran en la construcción del aeropuerto la forma de cómo llevar comida y satisfacción a su hogar. Implicaría, además, poner en riesgo la credibilidad y los contratos que ya se han venido generando”, indicó el aspirante de la coalición PRI-PVEM-Panal, que integran Todos por México.

En conferencia de prensa, al pie de los cimientos de lo que será la torre de control del nuevo aeropuerto, el aspirante presidencial advirtió que para cuando termine este año el nuevo aeropuerto tendrá prácticamente construidas dos pistas, además de esta torre de control.

Tras visitar la cabecera de una pista, la base del edificio terminal y la torre de control, comentó que el Valle de México no podría ser competitivo si no está bien conectado y con ello la Ciudad de México perdería “brutalmente” su atractivo para turistas e inversionistas.

“De por sí, conforme a diferentes indicadores del entorno para hacer negocios, es una Ciudad que ha venido perdiendo competitividad, que no ha venido construyendo un buen entorno para hacer negocios, un entorno transparente, un entorno donde se respete el Estado de derecho, donde se simplifiquen los trámites”, dijo el precandidato presidencial.

En este marco, Meade y Arriola advirtieron sobre la saturación del Aeropuerto Internacional Benito Juárez y presentaron cinco propuestas para aprovechar el predio de 750 hectáreas que ocupa esta central aérea y generar espacios de desarrollo y recuperación ambiental.

Hablaron de la generación de 450 mil empleos para el oriente del Valle de México entre el Nuevo Aeropuerto y el aprovechamiento eficiente de las instalaciones actuales; mejorar la conectividad, no sólo entre la Ciudad y el nuevo aeropuerto, sino de la capital del país en su conjunto.

Recuperar, precisaron, el patrimonio ambiental de la Ciudad y compensar su deterioro por mala planeación; dar movilidad social para que haya nuevos espacios que den aliento a la ciudadanía, que exista mayor presencia de hospitales, escuelas, universidades y guarderías que permitan, para el oriente, una solución plena e importante.

Suma a Heriberto Galindo. José Antonio Meade designó ayer a Heriberto Galindo Quiñones como su consejero político, quien tiene experiencia en actividades políticas y diplomáticas. Fue presidente de la Cámara de Diputados en la 56 Legislatura y también ocupó una curul en la 62 Legislatura; ha sido cónsul general de México en Chicago y embajador en Cuba. Se desempeñó como director general del Consejo Nacional de Recursos para la Atención de la Juventud.

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