Las rutas guiadas gratuitas toman fuerza en la Ciudad de México , aunque ahora, uno de los retos es atraer a los turistas nacionales, ya que la mayoría continúa siendo extranjeros, aproximadamente un 95% de los participantes.

El director de la empresa Estación México , Marco Polo García , afirma que este tipo de tours han “triplicado” su asistencia desde que iniciaron a finales de 2015. Al comienzo, el concepto de hacer paseos sin costo todavía era “muy extraño” , al contrario de lo que ocurría en Europa, donde estaba mucho más desarrollado.

En México, los free walking tours aparecieron por la demanda de los viajeros europeos. “Ha cambiado un poco, pero es una cuestión cultural; la gente en México no es mucho de caminar, sino de subir al turibús” o a otros transportes que los recoja en su hotel.

Las propuestas

Estación México

ofrece recorridos por e l Centro Histórico y Coyoacán. La dinámica de los recorridos gratuitos es similar en todas las agencias: al visitante no se le exige que pague alguna tarifa y, al final, puede entregar propinas a los guías , quienes ceden parte de éstas a la empresa.

García relata que al principio tuvieron “una especie de discusión” con los guías oficiales, pero finalmente hablaron con la Secretaría de Turismo capitalina. Les dijo que podían trabar sin problema, mientras que no lo hicieran en ciertas áreas y dependencias.

La empresa Strawberry Tours ha sido de las últimas en aterrizar en la Ciudad de México . Su responsable, Gabriel Castro, dice que los guías que llevan a cabo los recorridos —todos ellos locales— tienen una formación académica que los convierte en “expertos en áreas de estudio” , como antropología, arqueología o turismo; son bilingües y están certificados por la Sectur.

Son freelance para “tener un ingreso extra”. Que su remuneración sea a través de propinas los hace excelentes, si es que quieren ser bien remunerados.

Paga lo que tú crees que vale

El lema del recorrido es “paga lo que tú crees que vale”. En función al desempeño del guía, la calidad y el bolsillo de cada persona, se puede dar más, menos o nada. Strawberry Tours , con presencia en otras siete ciudades del mundo, empezó con sus actividades en México el pasado enero.

La gran diferencia de la compañía, señala Castro, es la llamada “promesa del 10%” : este importe de las propinas va destinado a ayudar a una fundación o una organización comprometida con alguna problemática social.

En la Ciudad de México, estos fondos van destinados a la reincorporación de los niños en situaciones desfavorables . Entre sus opciones, esta empresa organiza un recorrido de tacos.

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