1. Tapalpa. Jalisco

Enormes rocas de textura porosa, de hasta 40 metros de altura, interrumpen las verdes extensiones del Valle de los Enigmas. Justo por eso, también es llamado "el Valle de las Piedrotas". Se encuentran a cinco kilómetros, aproximadamente, del Pueblo Mágico de Tapalpa. Los visitantes tienen permitido escalar las rocas más pequeñas para tomarse la foto del recuerdo o deslizarse en una tirolesa que pasa de una piedra a otra. Contrata un recorrido para conocerlas, en el . También hay vuelos en globo, rutas de ciclismo y parapente.

2. Valle de los Monjes. Chihuahua

Aunque las Barrancas del Cobre ya son lo suficientemente increíbles por sí solas, todavía guardan secretos conocidos por los locales y visitantes afortunados. Uno de ellos es el Valle de los Monjes, un conjunto de rocas en forma de torres, a las que se les encuentra forma humana; de ahí su nombre. Alcanzan los 30 metros de altura. Se ubica cerca de Creel, Pueblo Mágico. Estos recorridos se recomienda hacerlos en compañía de un guía de origen tarahumara ( ).

3. Prismas Basálticos. Hidalgo

Estas columnas son prismas perfectos, creadas por la actividad volcánica hace millones de años. En época de lluvias son bañadas por la caída de cuatro cascadas. Son de varios tamaños; algunas alcanzan los 40 metros de altura. La gente puede observarlas desde arriba, a través de un puente colgante. También hay una pequeña tirolesa y a a unos pasos cuentan con servicio de comida y cabañas. Están ubicadas a 15 minutos del Pueblo Mágico de Huasca. Desde el hotel se organizan recorridos para conocerlos.

4. Sierra de Órganos . Zacatecas

Las formaciones de roca volcánica que son la máxima atracción de este parque nacional, alcanzan los 80 metros de altura. La reserva obtiene su nombre por sus siluetas alargadas y el sonido que produce el aire al pasar entre ellas. Cerca de ellas, vuelan aves como el águila real y el halcón peregrino. Este parque forma parte de la Sierra Madre Occidental. Una de las comunidades más cercanas es el Pueblo Mágico de Sombrerete. Se ofrecen recorridos sin costo por la reserva, para conocer su fauna e incluso escalar algunas rocas.

5. Peña de Bernal. Querétaro

Para imaginar lo espectacular que es, basta mencionar que con sus 300 metros de altura, es uno de los monolitos más grandes del planeta. Desde el pueblo de Bernal, a solo cinco minutos en auto, se puede admirar perfectamente la enorme roca de origen volcánico. Si te gustan los recorridos extremos, puedes escalarla por medio de una vía ferrata: el punto máximo al que puedes llegar se localiza a 45 metros de altura.

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