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El domingo se llevó acabo la trigésima segunda entrega de los MTV Video Music Awards , y con ello, el esperado estreno de “Look What You Make Me Do”, el nuevo video de Taylor Swift.
Después de casi un año prácticamente escondida de los reflectores, la cantante regresa con una “nueva imagen” aunque no precisamente innovadora : dirigido por Joseph Kahn, “LWYMMD” contiene una serie de referencias a todos los escándalos en los que se ha visto envuelta en los últimos años, reflejados en imágenes usadas anteriormente por una gran cantidad de videos musicales icónicos de la cultura pop .
Al inicio del video, el personaje de Swift del video “Out of the Woods” sale de una tumba, al más puro estilo Thriller de Michael Jackson, para enterrar a la “vieja Taylor” representada por su vestido Oscar de la Renta que usó enla Gala del MET.
Cortesía Billboard
La cantante aparece después en una tina repleta de joyería, una imagen usada anteriormente por Britney Spears, y ¿por qué no?, su archirrival Katy Perry en el video “This is What We Do”. Tal vez, lo más interesante de este momento es el billete simbólico de $1 USD, el cuál ganó recientemente por una demanda de acoso sexual contra un conductor de radio.
Cortesía YM y YouTube
Sentada en un trono dorado y rodeada de serpientes en un vestido rojo de Balmain y Joyas Bulgari, Swift se apodera del emoji que inundó sus redes sociales en el 2016, tras la controversia ocasionada por Kim Kardashian y Kanye West al exponer al mundo una serie de Snapchats, dejando ver que su inocencia es solo una fachada. Anteriormente, la drag queen estadounidense, Alaska Thunderfuck, realizó una táctica similar después de ganar la segunda temporada de RuPaul’s Drag Race: All Stars, y coronarse como la “Queen of Snakes”, mucho antes que la rubia de Pennsylvania.
Cortesía Balmain y YouTube
El video de “What It Feels Like For a Girl” de Madonna, dirigido por Guy Ritchie, es la siguiente referencia visual, donde la cantante choca brutalmente su automóvil, y procede a posar frente a los periodistas, curiosamente con un Grammy en la mano. Ambos elementos de la escena representan un ataque directo a Perry: el choque sirviendo como referencia al video “Unconditionally” de Katy y la constante burla que le ha generado su fracaso a lo largo de los años en la prestigiosa entrega musical.
Cortesía YouTube
Nuevas referencias a “ Rumors ” de Lindsay Lohan, “ Can’t Be Tamed ” de Miley Cyrus , “Judas” de Lady Gaga , además de Gwen Stefani en “The Sweet Escape” y “I AM THE BEST” de 2NE1 aparecen cuando Swift asalta una compañía de streaming – en el 2015, la cantante le declaró la guerra a las plataformas de streaming por su pago injusto de regalías, por lo que Apple Music decidió mejorar sus políticas.
Quizás el momento más incómodo del video, es la escena de baile. Con un sequito de bailarines, vestidos muy al estilo de los acompañantes de Kylie Minogue y Britney Spears , y con la frase “I <3 T.S” en su pecho (su ex pareja Tom Hiddleson fue fotografiado usando una tank top con la leyenda), Taylor procede a realizar una rutina de baile incómoda, que visualmente recuerda mucho a “Formation” de Beyoncé.
La escena que más llama la atención (una obscura versión de la pirámide humana que Kylie Minogue presentó en “All the Lovers”), muestra a Swift por encima de looks “icónicos” de su carrera, en un intento algo fallido por autorreferenciarse, como anteriormente lo hicieron Madonna y Beyoncé.
A pesar de ofrecer muy poca innovación, la controversia surtió efecto: el video musical de 4 minutos ha roto el record, previamente impuesto por “Hello” de Adele, como el video más visto en 24 horas en YouTube, con 43.2 millones de vistas en su canal de VEVO. Nada mal para la chica a la que le encanta “hacerse la víctima”.
