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La primera vez que la Organización de las Naciones Unidas conmemoró el Día Internacional e la Mujer fue en 1975. La fecha se refiere a aquellas mujeres que han emprendido una lucha plurisecular por la participación de la mujer en la sociedad.
A propósito de esta fecha sugerimos la lectura de cinco escritoras mexicanas.
Nacida en pleno auge del pleito campesino, entre revueltas y fúsiles de 1900; la maestra con porte endiosado, Francisca Ernestina Moya Luna , mujer divina, conocida en el mundo del arte como Nellie Campobello , fue directora de la Escuela Nacional de Danza y fundadora del Ballet de la Ciudad de México .
Además de ser tutora del poeta León Felipe desde su infancia, Campobello fue una madre universal para el resguardo del arte. Una promotora cultural hasta el cansancio; de ahí que sus últimos días fueran pesados. La maestra de coreografía se despidió de México a los 85 años.
“Poesía no eres tú porque si tú existieras tendría que existir yo también y eso es mentira” rezaba la escritora Rosario Castellanos . Nacida en el México posrevolucionario el 25 de mayo de 1925, Rosario fue la voz de los oprimidos; indios y pobres brincan en Balún Canán y Oficio de Tiniebla , que son de las más importantes colecciones de literatura indigenista.
En 1972 su obra poética fue reunida bajo el mismo nombre, Poesía no eres tú . Defensora por partida doble al ser mujer y pobre en México, en su voz encontraron alivio y consuelo las clases oprimidas, habló por – los de abajo - y fue de las escritoras más importantes del siglo pasado.
De esta generación de mujeres recias nacidas en el México por la Revolución, otro es el caso de Guadalupe Amor , mujer que desafió al mundo de la literatura y la moral expresionista con su cuerpo, con su esencia misma de mujer.
Mejor conocida como Pita Amor , esta poeta mexicana de los cincuentas fue un torbellino de pasiones. Su belleza era tan grande como su capacidad creativa, cosa que en el poemario Yo soy mi propia casa dejó en claro. Su obra que fue aplaudida por la élite intelectual de la época y entre sus amistades se encontraban Juan Rulfo , Frida Kahlo y Alfonso Reyes .
La vida de Pita estuvo llena de altibajos, en los años posteriores a la muerte por ahogamiento de su hijo de dos años. Pita Amor recurrió a versos más duros y serios, escribía con pesadumbre pero nunca dejó de ser una mujer de carácter fuerte, sensible y decidida.
El caso de Elena Garro fue otra cosa. Considerada como una escritora maldita por medios internacionales debido su presencia casi satírica durante el movimiento estudiantil del 68 y su inagotable pelea literaria en contra de quién fuera su esposo durante 22 años, Octavio Paz .
Considerada una obra maestra sus libros Un traje rojo para un duelo y Los recuerdos del porvenir , la escritora dejó ver su transparencia como persona. Fue su vida un acto de protesta, hechos que le llevaron a un exilio durante 20 años del suelo mexicano.
Un ejemplo de poder verbal y voz de mujer en la actualidad es el caso de Valeria Luiselli , autora del libros como Papeles Falsos y Niños perdidos . Es considerada por su obra documental y su estilo narrativo como una de las nuevas revelaciones en letras latinoamericanas.
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